Devanna Winchester recibe una llamada de un viejo amigo, debido a esa llamada va al pequeño pueblo de Mystic Fall donde conoce a cierto hibrido original junto a toda su familia.
El tiempo transcurre, Devanna descubre mentiras y el hibrido va a hacer...
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Los tres Mikaelson llegaron, después de una dura media hora aguantando a Klaus, llegaron a la fábrica abandonada donde se escuchaba bruscos y grandes sonidos de lucha.
Con preocupación, Klaus junto con sus hermanas se adentraron y vieron como Devana estaba herida, pero luchaba como si nada como si no tuviera heridas.
-Cuidado.- con su velocidad vampírica, Kluas empujó a la persona que iba a atacar por la espalda.
-Has invitado a gente a la fiesta, que extraño de ti.- por la distracción que sufrió la joven, el demonio pelirrojo agarró del cuello a la joven.
Los Mikaelson iban a atacar, solo eran cinco personas contra ellos tres y Devanna.
-Quietos ahí, vampiruchos.- con un movimiento de manos les dejo pegados a la pared y soltó a Devanna, cuando le iba a atacar les lanzó contra los Mikaelson y calló con brusquedad al suelo-. Tranquila, bomboncillo, si matas a otros de mis demonios, por muy vampiros originales que sean, sin corazón y cabeza no pueden vivir.
Los cuatro demonios que acompañaban al resto rieron al ver a la Winchester tan débil.
-Vete al infierno hijo de perra.- gruño la pelinegra mientras se levantaba, pero el pelirrojo con sus poderes la lanzó hacia sus cuatro hombres quienes la desarmaron y obligaron a arrodillarse mientras le ponia unas esposas-. ¿Qué pasa? ¿No eres lo suficientemente fuerte para aenfrentarte a mi que me tienen que sujetar tus perros falderos?
-Ay, Winchester, la última que queda de su familia.- suspiro con exageración el pelirrojo, quien se acercaba a los mikaelson. Agarro la cara a cada uno hasta que con sus ojos completamente rojos vio al hibrido-.Interesente.
-Ellos no tiene nada que ver con nada, no saben nada, no me conocen. Dejáles marchar.- bramo Devanna, por alguna extraña razón los Mikaelson no podian ni moverse ni hablar.
-Lo dices tan segura, que casi me convences. Tienes un lazo con él.- le señalo con el dedo haciendo que la cazadora se tensase.
-No se de que me hablas.
-No me hagas idiota, se que sabes de lo que hablo. Tu nueva debilidad, tu alma gemela. Y por lo que siento, no es muy fuerte, ¿te has alejado? Claro que te has alejado, si no has podido salvar a tus hermanos como puedes salvarle a él.- a la pelinegra se le llenaron los ojos de lágrimas, pero no las soltaba, se negaba ha hacerlo y darle el placer al demonio-. Fijate, antes los demonios temblaban cuando escuchaban que los Winchester estaban en la misma ciudad.
-Ahora, estas arrodillada y con unas cadenas que no dejan pasar tu poder.- solto burlonamente un demonio que la tenia sujeta por los hombros.
-Iros al infierno!.- grito Devanna intentando usar sus dones, no pudo, no lo consiguió. Eso causo risa a los demoniosen los demonios.
