Narra Meiko
Cuando estuve por llevar a Izumi a la primaria llegó Kazami para hacerme preguntas, noté que Reiko y su hermano estaban preocupados; supuse que era porque no le agradaba mucho al sujeto frente a mí.
Meiko: Zero lleva a tu hermana a rehabilitación y a Izumi a la primaria por favor — pedí mientras hacía pasar al hombre
Reiko: ¿Estarás bien? — se notaba la preocupación en su voz
Meiko: Sí, estaré bien no te preocupes, cuando terminé pasó por Izumi y vamos contigo para ver que más puedes hacer — dije y los a puré ya que se estaba haciendo tarde para que la pequeña llegara a la primaria.
A lo que ellos se fueron, Kazami me hizo una serie de preguntas las cuales respondí con sinceridad; así estuvimos un par de horas, por lo que cuando acabamos, el subordinado de Rei se retiró. Faltaban 40 minutos para que Izumi terminará sus clases, por lo que me a puré para llegar unos minutos antes de su salida; en el momento en el que llegué, recibí una llamada la cual respondí sin ver de quien se trataba.
En la llamada.
Canaris: Diga
Rum: Tan fría como siempre Canaris
Canaris: Perdón, ¿Paso algo?
Rum: Esta noche tendremos una reunión, infórmale a Bourbon
Canaris: De acuerdo.
Fin de la llamada
Suspire con pesadez, no se para que sea esta reunión pero estoy segura que no será nada bueno; mientras guardaba el móvil, sentí que me abrazaban las piernas; por lo que miré en esa dirección encontrando a Izumi y a Shiho pegadas a una pierna cada una. Me puse a su altura y las abracé con cariño.
Meiko: ¿Cómo les fue? — cuestioné con una sonrisa
Izumi: Nos fue muy bien, tía ¿qué le dijo ese policía? — indagó curiosa
Meiko: Solo fueron preguntas sobre lo ocurrido no te preocupes — dije acariciando su cabeza
Shiho no mencionó ninguna palabra por la presencia de los demás niños, por lo que me despedí de ellos para ir a ver como va la recuperación de Reiko; sin embargo, le deje a la encogida una nota con mi dirección ya que tenía que hablar con ella y con el de lentes. Luego de algunos minutos, llegamos al centro de rehabilitación en el que monitoreo el progreso de Reiko; la mayor estaba por terminar la sección en la caminadora por lo que intuí que había avanzado rápido.
Meiko: Bien hecho, has mejorado más rápido de lo que imaginé — mencioné sonriendo
Izumi: La tía Reiko es genial — dijo alegre la menor
Reiko: Hola princesa, pensé que tardarían más, ¿Qué te preguntó ese hombre? — cuestionó nerviosa
Meiko: Tranquila, solo me pregunto si conocía a los tipos que allanaron la casa y si estaba enterada que pertenecían a un grupo peligroso — expliqué tranquila y para evitar más preguntas mencione — veamos, por lo que veo completaste la rutina que te deje, para mañana implementaremos otros ejercicios por hoy terminamos
Después de esas palabras, salimos con dirección al poirot ya que debía informarle a Rei y a mi tío sobre la reunión que llevariamos acabo con la organización; cuando llegamos, fuimos atendidas por una hermosa jovencita; pedí una malteada de fresa y una revanada de pay de melocotón, Izumi había pedido una malteada de chocolate y unas galletas mientras que Reiko pidio un frapuchino con un pedaso de pastel de arandanos. Nos encontrabamos esperando nuestros pedidos, hasta que vemos a Conan entrar rápidamente y ocultarse justo en nuestra mesa; acción que nos llamó la atención, aunque supuse que habría puesto algún micrófono.
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La hija de Gin
RandomUna joven que vive infeliz su vida fue forzada a trabajar en esa maldita organización, gracias al maldito que le arrebató a su madre delante de sus ojos; tenía tan solo 10 años cuando ocurrió aquella tragedia, nunca pensó que su propio padre fuera c...