Sweet (CON ERRORES)

Veintisiete

Jungkook sentía latir su corazón con demasiada prisa, estaba nervioso y ansioso por conocer la verdad, Jimin le guiaba por los pasillos, le tenía tomado de la mano y como caminaba frente a él, de vez en cuando giraba el rostro para verle.

Podía sentir como una advertencia en su cerebro, algo que trataba de detenerle o de por lo menos calmarle, pero no funcionaba.

El piso en el que se encontraban era subterráneo, utilizado especialmente para mantener encerrados a los vampiros, como si fueran presos porque no consideraban necesario el matarlos y en ese lugar los protegían del sol.

Todo era silencio ya que las celdas de los vampiros más bien eran habitaciones y tenían una rendija donde les pasaban los alimentos.

Llegaron a la puerta final donde dos hombres a los que reconoció como integrantes del equipo gamma cuidaban, Jimin ni siquiera les dijo algo cuando llegó a la puerta, ellos tampoco lo hicieron, simplemente colocaron su mano en los sensores a cada lado hasta que la puerta estuvo abierta.

La habitación en el interior era completamente blanca, no había nada más que una silla en el centro, donde un hombre o vampiro, Jungkook no estaba seguro, se encontraba sentado con el rostro tapado y amarrado.

Cuando estuvieron dentro, Jungkook tragó saliva y Jimin soltó su mano para luego apegarse a su cuerpo y tomar su rostro con ambas manos.

-Hoseok me ayudó a reconocerlo.-susurró.-Él también estuvo ahí.

Jungkook observó tras Jimin, el hombre no parece darse cuenta que habían dos personas más dentro.

-Jungkook, una vez retire el saco que lo cubre, despertará y tendrás tiempo para hablar con él.-siguió hablando Jimin.

Jungkook frunció las cejas pero asintió, Jimin no dijo más, pero seguía con una expresión preocupada, atrajo su rostro y le dio un corto beso antes de separarse y alejarse.

Caminó hacia el hombre colocándose tras él y sin esperar más retiró el trapo que lo cubría, Jungkook sintió entonces que todo color abandonaba su rostro y una opresión se instalaba en su pecho.

-No...

Debía de ser una broma, una muy cruel, simplemente era imposible que él fuera el culpable.

-¿Mi-Minwo..?

Jimin se pegó a la pared y bajó la mirada no soportando la impotencia en los ojos del pelinegro.

El hombre en la silla trató de recobrar por completo los sentidos al escuchar la voz de Jungkook.

-Minwoo.-volvió a decir el pelinegro acercándose al hombre para agarrar sus hombros y agitarlos.-Dime que no es cierto, tu no lo hiciste ¡Dímelo!

Para consternación del pelinegro Minwoo soltó una baja risita.

-¿Todavía estás en negación? ¿Me estás viendo y no lo crees?-preguntó divertido el hombre quien seguia sin poder centrarse bien.

Jungkook le soltó dando un paso atrás, se sintió angustiado y traicionado.

Minwoo siempre fue parte de la familia, como un segundo padre que le cuidó todavía más cuando su padre murió, no dejó que se derrumbara ni que se sintiera solo en ningún momento.

¿Entonces por qué...?

Apretó sus manos en puños reteniendo con todas sus fuerzas las ganas de llorar no quería verse todavía más débil.

-¿Pero, por qué?-preguntó entredientes.

Minwoo se encogió de hombros.

-¿Sabes lo que es vivir en la sombra de otro?-preguntó Minwoo.-Yo soy mucho
mejor que tú estúpido padre y aún así...

Minwoo dejó de hablar cuando de repente sintió un dolor agudo en el rostro, Jungkook le había soltado un puñetazo directo a la nariz.

-¡No te atrevas a referirte de esa forma de mi padre! Él siempre te apreció, eras su mejor amigo ¡Como un hermano! Y te atreviste a traicionarlo.

Minwoo soltó una risa más larga y ruidosa que no hizo más que enfurecer al pelinegro y pelirrojo.

-El sentimentalismo nunca te llevará lejos.-dijo luego de un rato.-Yo quería ser un líder de equipo pero con tu padre vivo no lo lograría nunca, de todas formas no tenía oportunidad de sobrevivir a la misión, yo solo le ayudé a alcanzar más rápido la muerte.

Jungkook negó sin poder creer lo que escuchaba, Jimin enterró sus uñas en las palmas de sus manos empezando a sentir impotencia también, deseaba tanto ir hacia Jungkook y abrazarle para que se sintiera mejor.

-Pero...-Jungkook hizo una pausa cuando sintió que su garganta se cerraba.-Pero éramos una familia, n-no lo entiendo.

-No tienes porqué entenderlo.-dijo Minwoo con seriedad.-Si te cuidé luego de su muerte fue por el sentimiento de culpabilidad, nada más, así que si vas a matarme o algo ahora, apúrate que me aburro.

Jungkook desvió la mirada y mordió con fuerza su labio, no sabía cómo manejar todos los sentimientos que sentía en ese momento, irá, dolor y decepción.

Podría pasar a algo más que golpearlo? ¿Cómo se atrevería a matarlo? La idea igual era dolorosa aunque por supuesto que se lo merecía.

Jimin se acercó en ese momento a él, probablemente notando el conflicto que tenía en ese momento.

-No tienes que obligarte a nada.-dijo en voz baja Jimin.-Aunque merezca el peor de los destinos, tu no tienes que obligarte a nada.

Jungkook inhaló profundo y cuando soltó el aire por la boca ya no pudo contenerse, en su rostro se formó una mueca y empezó a lagrimear, sus piernas le fallaron y terminó cayendo de rodillas mientras atraía a Jimin y le abrazaba por las piernas.

Jimin abrazó sus hombros sintiéndose débil, no pudo evitar el mirar a Minwoo de forma asesina y este rodó los ojos.

-Que Jungkook no pueda hacerlo, no significa que yo tampoco pueda.-dijo entredientes.-Voy a arrancarte la cabeza.

Minwoo rió.

-Claro, no podrías hacerlo, soy muy importante para Jungkook y él no te lo perdonaría.

¿Importante? Pensó Jungkook. Minwoo dejó de serlo desde el momento que supo la verdad.

-Oh pero yo sí.

Jimin miró hacia la entrada al escuchar una nueva voz, justo encontrándose con Namjoon quien tenía una pistola en sus manos, ni siquiera dijo ni esperó por más, presionó el gatillo y el pelirrojo observó con los labios entreabiertos como caía en la frente del hombre, matándolo instantáneamente.

Luego volvió la mirada a Namjoon y mordió su labio con nerviosismo.

-¿Tú...?

-Es mi culpa.-dijo Yoongi entrando en ese momento al cuarto e interrumpiendo a Jimin.-Me inquietó lo que sentía en el vínculo con Jungkook y como que tuvimos la idea de lo que estaba pasando lo lamento, esto era privado y nosotros...

-Yo también tenía el derecho.-interrumpió Namjoon.-Él iba a matar a Yoongi.

Jungkook por su parte solo presionó más el cuerpo de Jimin y Yoongi al ver su estado negó con la cabeza.

-No puedo verlo así.-murmuró acercándose a Jungkook y colocando su mano sobre la cabeza.-Todo estará bien, Jungkook.

Jimin entonces sintió el cuerpo de Jungkook más pesado y supo que Yoongi había usado alguno de sus poderes para hacer que durmiera.

Tal vez no había sido tan buena idea llevarlo tan pronto.