Sweet (CON ERRORES)

Catorce

Cuando Jungkook salió del cuarto de baño ya vestido con ropa limpia la cual metió previamente, se temió por las miradas o comentarios que podría recibir por parte de sus compañeros.

Pero para su sorpresa los tres estaban dormidos de forma incómoda en la cama.

Buscó con la mirada a Jimin encontrándolo en el sofá ubicado a un metro de donde se encontraba, apenas cruzaron mirada le guiñó un ojo y cruzó una pierna sobre la otra.

-Jimin ¿Qué les hiciste?-preguntó preocupado.

El pelirrojo rodó los ojos y se levantó para caminar hacia el pelinegro.

-Les ordené que durmieran.-respondió encogiéndose de hombros y colocando sus manos en el abdomen del más alto para luego ascender y rodear su cuello.-Hueles muy bien Jungkookie

El cuerpo del vampiro se apegó al del cazador quien con nerviosismo miró hacia la cama de nuevo.

-Te he dado desayuno ya.-dijo entredientes sin despegar su mirada de sus compañeros.

Jimin refunfuñó.

-Siempre eres tan aguafiestas lindura.-se quejó, para luego depositar un corto beso en su barbilla.-Pero está bien, no insistiré por ahora, tus compañeros despertarán pronto.

Jungkook suspiró aliviado cuando las manos de Jimin le dejaron ir, entonces regresó su mirada a él, no fue capaz de apartarla de inmediato y no supo si se trató de algún truco por parte de Jimin o porque de alguna forma le impresionó encontrar calidez en él.

Entreabrió los labios para tratar de decir algo, pero nada se le ocurria y cuando dejó de intentarlo simplemente hizo lo primero que se le ocurrió sabiendo que no sería peligroso, alzó su mano y la llevó a la mejilla helada del pelirrojo quien cerró los ojos de inmediato.

Jungkook supo entonces que no se trataba de algún truco cuando aún sin sus ojos sobre él fue incapaz de apartar su mirada.

Acarició suavemente su piel y Jimin no hizo más que apoyarse en su palma atraido por el calor que emanaba,

-¿Qué hacen?

Jungkook se apartó al escuchar la voz de Seokjin quien les miraba confundido desde la cama mientras se sentaba.

El pelinegro boqueó, alarmado por ser descubierto y antes de poder pronunciar palabra, Jimin lo hizo.

-Vuelve a dormir.-ordenó y para sorpresa de Jungkook, Seokjin se desplomó de nuevo, cayendo sobre el abdomen de Taehyung.

Observó a Jimin quien le miró y sonrió con superioridad para luego encogerse de hombros.

-Ves, lo tengo todo bajo control.-aseguró, para luego acercarse a su rostro y depositar un fugaz beso en sus labios.

Jimin caminó hacia el sofá de nuevo y Jungkook se quedó pegado en su lugar, debía tener más cuidado.

El clima en el bosque era diferente al de la carretera, hacía demasiado frio y la humedad de la tierra dificultaba un poco el caminar

Jimin como era de esperarse iba adelante de los cazadores, vigilando de que no hubiera algún vampiro descontrolado en la zona.

-Entonces.-dijo Seokjin quien iba sujetándose de alguno que otro árbol, ya que a comparación de los demás él no tenía la misma resistencia y ya llevaban una hora caminando.-¿Se supone que estamos buscando una mansión con aspecto lúgubre en la cima de la montaña? ¿Eso siquiera tiene sentido? Ya antes se había inspeccionado la zona sin obtener resultados.

Jimin miró hacia atrás unos segundos antes de regresar al frente.

-¿Crees que un vampiro puro dejaría su hogar vulnerable? Sus últimas energias las utilizan para protegerse de posibles... Intrusos, pero ustedes tienen la suerte de que yo tenga de su sangre en mí así que no tendremos problemas en encontrarla y entrar, los llevaré directo a él.

Escuché que nadie queria encargarse del caso de Jihoon porque hay vampiros de última categoría cuidando la zona.-dijo ahora Taehyung

-Pero el padre de Jungkook logró llegar bastante cerca ¿No?-cuestionó Jongsuk.-Fue el único en aproximarse tanto.

Jimin frunció las cejas y detuvo su andar cuando de repente un recuerdo vino a él al escuchar que nombraban al padre del pelinegro.

Un testigo, uno más aparte de él, un hombre escondido entre los arbustos al otro lado y que al ver la situación frente a ellos, huyó cautelosamente.

Había algo importante en su recuerdo y era que si logró distinguir el rostro de esa otra persona, estaba seguro que si lo encontraba, estaría más cerca del culpable.

Jungkook dejó de caminar también al ver que Jimin lo hacía, se acercó un poco a él pero algo más llamó su atención

-¡Cuidado!-exclamó Taehyung.

El pelinegro actuó rápido cuando vio aparecer a un hombre armado con un arco, apuntando directamente a Jimin con la flecha. Lo atrajo y cubrió con su cuerpo en un solo movimiento mientras se hacía a un lado para cubrirse tras el árbol junto a ellos, ambos cayeron sentados y Iimin por fin reaccionó ante un olor en específico.

El pelirrojo parpadeó y con horror observó el hombro derecho de Jungkook la flecha había logrado atravesar su piel y la sangre no se habia hecho esperar

Jungkook se quejó y llevó su mano a donde estaba incrustada la flecha, Jimin jadeó y sintió un hormigueo en todo su cuerpo.

Habían herido a Jungkook por su distracción, él pudo haberlo evitado..

-Jimin está bien.-le llamó Jungkook al ver como empezaba a alterarse, sus ojos se tornaron rojos y no era tanto por la sangre de Jungkook.

Estaba furioso, furioso de que lo lastimaran y él, necesitaba romper algo, los huesos de quien se atrevió a tocar a Jungkook por ejemplo.

-Voy a matarlo.-dijo entredientes y trató de levantarse pero las manos de Jungkook lo detuvieron.

-No, cálmate, ya debe de estar muerto.-le dijo Jungkook al instante ya que Jimin pareció no escuchar a sus compañeros disparando.

Jimin gimoteó de impotencia y con sus manos temblorosas trató de tocar la flecha, él podría partirla y quitarla.

-Son de plata, no las toques.-murmuró Jungkook tomando sus manos.

Jimin frunció las cejas y se zafó del agarre en sus manos ¿A quién le importaba si eran de plata?

Se tensó cuando de repente alguien se hincó a su lado, se trataba de Seokjin quien le sonrió como si quisiera reconfortarlo.

-Estará bien, yo me ocupo de quitar la flecha y curarlo.-aseguró

¡¿Estará bien?! ¡Se estaba desangrando! ¡Lo hirieron! ¿Por qué parecía el único preocupado por ello?

-Iré a investigar.-declaró Jongsuk.-Taehyung tu cuídalos.

Jimin observó al pelinegro cuando sus cálidas manos le sujetaron el rostro sus pulgares pasaron bajo sus párpados inferiores y solo en ese momento Jimin se dio cuenta que había soltado lágrimas.

-No es la primera vez, tranquilo.-trató de calmarlo Jungkook, pero para Jimin hizo lo contrario.

¡¿Cómo que no era la primera vez?! ¡¿Quién más se había atrevido a lastimarlo?!

Los labios de Jimin temblaron y mientras cerraba los ojos se acurrucó contra el pecho de Jungkook, del lado donde ni siquiera tocaba el hombro lastimado y le
daba espacio a Seokjin para que trabajara.

El hecho de que hiciera caso y se quedara quieto únicamente era porque no queria dejar solo a Jungkook, pero no volvería a bajar la guardia, no permitiria que volvieran a tocarlo.

Al menos podia estar seguro de algo, por mucho que la sangre de Jungkook fuera su debilidad, si él saliera herido su aroma dulce no despertaría su sed, pero probablemente si su sed de venganza.