El héroe enmascarado (supercorp)

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Kara PV

Era medio día, Barry se había comido muchas chocolatinas y patatas fritas durante la mañana.

Ahora íbamos a comer, yo me compré una ensalada y un par de hamburguesas que tenía que calentar la carne, además de patatas fritas con kétchup.

Barry se compró macarrones a la carbonara, dos hamburguesas y patatas fritas con kétchup.

—Barry cierra las cortinas de las puertas y pon el seguro.

—Sí. —se levantó e hizo lo que le pedí, y cerré las cortinas de las ventanas y extendí la mesa. Preparamos la comida para ser calentada.

Me bajé las gafas y usé mi visión en los macarrones de Barry y en mis hamburguesas, también calenté las suyas.

Después me subí las gafas, corrí las cortinas y Barry hizo lo mismo con las de la puerta.

—A comer. —dijo al sentarse delante de mí.

Nos comimos nuestra comida con gusto.

—Dios, es genial tenerte cerca cuando sales de viaje, para calentar la comida, es mucho más rápido que usar un microondas. —me reí por su comentario. —¿Cuánto tiempo crees que tardaremos?

—No sé donde estamos, no hemos pasado ninguna ciudad.

Un par de horas después llegamos al fin a la estación de Nacional City.

Nos bajamos y tiramos las bolsas de basura, salimos de la estación y nos despedimos.

—Nos vemos mañana en Catco. —le dije.

—Ahí estaré.

Me fui a casa para darme una ducha y cambiarme de ropa, después iría a casa de mi madre a por Lena, pero sabía que tenía que hablar con ellas. Mi madre es inteligente y sabe que no lo he contado todo en el artículo, ni sobre el arresto de Lex.

Llegué a la casa de mi madre, cuando entré vi al mayordomo, lo saludé y le pregunté donde estaba mi familia.

—Se encuentran en el salón, tomando el té, ¿se va a quedar a cenar?

—Supongo que sí.

—¿Quiere que le lleve un té señorita Kara?

—No, pero si un cacao, por favor.

—Ahora mismo.

Fui al salón y las dos me vieron entrar, sonreí y me acerqué a ellas, Carter, fue el primero en levantarse y se acercó a mí, nos abrazamos.

—Bienvenida. —dijo.

—Gracias hermano.

Después se acercó mi madre y Lena y nos abrazamos.

—¿Te quedas a cenar? Pero que pregunto, por supuesto que te quedas. Voy avisar. —dijo mamá.

—Mamá, tranquila, ya lo saben.

—Oh, de acuerdo.

Nos sentamos de nuevo.

—Carter, vete a hacer los deberes. Tu hermana tiene que hablar con nosotras de algo muy serio y por muy inteligente y maduro que seas, aún eres un niño y es mejor para ti no escuchar esto.

—Pero mamá.

—Carter, por favor.

—De acuerdo. —dejó su vaso en la mesa y se levantó, se acercó a mí y me abrazó.

—Pórtate bien, en el fin de semana, cuando vengas a casa, te daré un regalo que he comprado en Metrópolis. ¿De acuerdo?

—Vale. —nos volvimos a abrazar y se fue.