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Fuiste tú

El rubio estaba cansando, había estado estudiando mucho para poder hacer aquel examen, no había podido ver al castaño durante algunos días después de lo que había hablando, se sentía un poco mal por eso, quería tener el castaño a su lado y abrazarlo, pero se negaba a esos deseo, aquellos lindo deseos de estar con Mason, soltó un suspiro para luego ver su teléfono, aún no se atrevía a mandarle un mensaje, dejo aquel aparato a un lado para luego mirar hacia la ventana, era fin de semana a si que podía aprovechar en salir a dar una vuelta, se levantó de aquella silla para caminar hacia la habitación de Miriam, tocó suavemente la puerta, pero al no tener respuesta la abrió con cuidado, pudo ver cómo aquella mujer dormía en su cama, cerro con cuidado la puerta para luego alejarse.

Se acercó a la mesa y agarro su teléfono, le marco al número de Mason, esperando a que esté contestará, camino por el lugar buscando un papel y pluma, al escuchar la voz del castaño, solo pudo sonrier.

–Pino, como estás. – coloco el papel en la mesa y empezó a escribir mientras sujetaba el teléfono con su hombro pegado a la mejilla.

–Bien Bill, como estás tu.

La dulce voz del castaño le hacía sentir muchas cosas, extraña escucharlo y tenerlo cerca, empezó a escribir en el papel. –Estoy bien, está libre hoy, me gustaría salir contigo.

Al termina de escribir, espero que el castaño le contestará, estaba un poco desesperado por ir a verlo, se la paso estudiando un buen rato, pero necesitaba distraerse un poco.

–Si estoy libre, quiere que pase por tí.

–Claro, te espero, me llamas cuando llegues. –colgo la llamada para luego ir a darse un baño, sería rápido para no hacer espera al castaño en lo que llegaba.

Ambos estaba caminando por la plaza mirando con detalle el lugar, Mason no duda en entrelazar sus dedo con los del rubio, ambos se sentía tan seguro al motrar aquel pequeño gesto de amor, a Bill le valía la mirada de algunas persona, después de to...

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Ambos estaba caminando por la plaza mirando con detalle el lugar, Mason no duda en entrelazar sus dedo con los del rubio, ambos se sentía tan seguro al motrar aquel pequeño gesto de amor, a Bill le valía la mirada de algunas persona, después de todos para el, ellos no era más de simplemente humanos insignificante, mientras que el castaño se sentía bien, le incomodaba un poco pero al ver la confianza del rubio se le pasaba.

Ambos entraron a una tienda de ropa, Bill empezó a ver cada detalle de las prendas, buscando algo que le quede bien, en cambio Mason solo miraba con atención lo que hacía el contrario, aún no podía creer que estaba saliendo con aquel ex demonio, le parecía genial, se acercó al rubio y lo abrazo por detrás.

–Se te vería bien un traje formal. –le susurró cerca del oído.

Bill sintió una corriente electrizante recorrer por toda su columna vertebral, sentía sus corazón latir tan rápido, tener al castaño tan cerca y sentir sus respiración chocar detrás de su oreja, lo hacía sentir un cosquilleo por cada parte de su cuerpo, era raro, alejo un poco al castaño para luego sonrierle con algo de nervios, empezá a sudar tan solo tener el castaño de a si de cerca.

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