seventeen

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WHY STOP NOW !

WHY STOP NOW !

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❪ 🌗 ❫









   NETEYAM NO PUDO CONTENERSE cuando vio a Cyra en un vestido que no hizo más que incrementar dolorosamente su deseo. La prenda parecía tener aberturas en las zonas indicadas, permitiendo que viera sin pudor la carne de sus muslos y la curvatura de su trasero, además de sus tentadoras clavículas que en múltiples ocasiones lo provocaron en secreto.

Al mirarla olvidó que ya tenía a alguien que lo ayudara con la prolongación de su celo. Olvidó las consecuencias de buscarla y la oscuridad de su interior volvió a cegarlo.

Estaba seguro de que los tragos que traía encima no eran la única razón de la debilidad de su autocontrol. Tenerla a escasos metros fue una clara invitación para perder la cabeza. Y posiblemente sucedió, puesto que terminó ayudándola a entrar a su habitación.

Ella tropezó varias veces, lo que causó que Neteyam la sujetara de la cintura en un intento de evitar que se diera contra el viejo mármol.

De cualquier forma mantenerla lejos nunca fue una opción.

ー¿Ya no me odias? Dímelo. Quiero escucharlo.

ーHaz silencio ーla calló, pero la humana negó infantilmenteー. Sigo odiándote, eres molesta y me estás arañando el brazo.

ー¡Ni siquiera te duele, mentiroso!

ーPero me estresas, así que ya suéltame.

Cyra sonrió, demasiado borracha para razonar.

ー¿Y por qué no me apartas, eh?

ーBasta, que no estoy jugando.

ー¿Ah, sí? ーfrunció el ceño. Estaba un poco decepcionada. Sólo quería divertirseー. ¿No será que lo disfrutas tanto y por eso no me detienes?

Le ponía los nervios de punta que ella se acercara tanto, que le hablara en un tono seductor y que tuviera la razón: no quería apartarla. No era capaz de alejar esas pequeñas manos que recorrían las líneas de sus marcados abdominales, acariciándolos a su antojo e incluso con cierta curiosidad. Tampoco lo intentó. Permaneció ahí, permitiéndole que lo doblegara a su manera.

Dawson estaba muy ocupada explorando la extensión de su torso sin darle importancia a las expresiones de sufrimiento en el rostro del macho que se debatía entre correr en dirección opuesta o continuar.

Lo torturó desde que llegaron al laboratorio, mas no dijo nada. No la repudió. Y era alarmante el hecho de que no le disgustara en absoluto, sino todo lo contrario.

Quería más. Lo necesitaba.

Sabía que sus instintos primitivos no iban a darle un respiro hasta que la tomara. Sabía que debía reprimirlos de inmediato antes de cometer una locura.

satellite ✿ neteyamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora