Félix sabía que quería pedirle matrimonio a Samantha de una manera fuera de lo común, algo que reflejara la singularidad de su amor y su historia juntos. Después de pensar en diferentes ideas, decidió organizar un evento sorpresa con la ayuda de sus amigos y familiares.
Una tarde de verano, Félix llevó a Samantha a un lugar especial para ambos: una playa tranquila donde habían pasado muchos momentos memorables. Al llegar, se encontraron con un grupo de amigos y familiares, todos sonrientes y emocionados.
Samantha miró sorprendida a su alrededor.—¿Qué está pasando, Félix?—preguntó curiosa.
Félix tomó su mano y la llevó hacia el centro del grupo, donde una gran carpa estaba decorada con luces y flores. Dentro de la carpa, había una proyección de fotografías y videos de su vida juntos, desde el primer día en que se conocieron hasta los momentos más especiales que habían compartido con Sophie.
—Mira, Samantha, esto es una muestra de nuestro camino juntos. Cada momento ha sido único y especial, y quiero que estemos juntos en cada paso que daremos en el futuro—dijo Félix, con el corazón latiendo con emoción.
A medida que las imágenes y los videos seguían proyectándose, Félix tomó un micrófono y se dirigió a Samantha con palabras llenas de amor y compromiso. Habló sobre su amor inquebrantable, su conexión única y la maravillosa familia que habían formado juntos.
—Samantha, tú eres mi compañera en todas las aventuras de la vida, la persona con la que quiero reír y llorar, y la madre excepcional de nuestra hermosa Sophie. Quiero compartir cada sueño y cada desafío contigo, y no puedo imaginar mi vida sin ti. Eres mi amor verdadero y quiero que estemos juntos para siempre—expresó Félix, con los ojos llenos de ternura.
Samantha estaba conmovida por las palabras de Félix y las muestras de cariño de sus seres queridos. Cuando él se arrodilló frente a ella y sacó una caja, su corazón latía con fuerza.
—Samantha, ¿quieres ser mi esposa y compartir nuestras vidas en esta hermosa familia que hemos formado?—preguntó Félix, abriendo la caja para revelar un hermoso anillo de compromiso.
Samantha tenía lágrimas de felicidad en los ojos mientras asentía emocionada.—Sí, Félix, sí. Quiero ser tu esposa y estar contigo en cada paso de nuestro viaje juntos—respondió con una sonrisa brillante.
Los aplausos y felicitaciones resonaron en el aire mientras Félix deslizaba el anillo en el dedo de Samantha y la abrazaba con amor y alegría. En ese momento mágico, rodeados de amor y con Sophie como testigo.
...
El día soñado había llegado para Samantha y Félix. En un hermoso día de primavera, rodeados de familiares y amigos, se encontraban en el altar, listos para unirse en matrimonio. Sophie, su adorada hija, estaba emocionada por ser parte de esta ocasión especial y esperaba con ansias el momento de participar en la ceremonia.
Sophie llevaba un encantador vestido blanco, acorde al tema de la boda. Caminaba hacia el altar sosteniendo un pequeño ramo de flores blancas, su rostro iluminado por la emoción. Al llegar, se colocó junto a su mamá y miró con ternura a su papá.
El ambiente estaba lleno de amor y emoción mientras el oficiante hablaba sobre el significado del matrimonio y la importancia de la unión de la familia. Sophie escuchaba atentamente cada palabra, sabiendo que su mamá y Félix se amaban profundamente.
Llegó el momento de los votos, y Samantha y Félix se miraron a los ojos, prometiéndose amor eterno y fidelidad. Cuando fue el turno de Sophie de participar, se acercó al micrófono con valentía y comenzó a hablar con dulzura.
—Mamá, Félix, quiero decirles lo felices que estoy de que estén casándose. Ustedes son mi familia y los amo mucho. Prometo siempre apoyarlos y ser la mejor hija que pueda ser—dijo Sophie con voz clara y segura, mientras lágrimas de emoción llenaban los ojos de sus padres.
El gesto de Sophie tocó el corazón de todos los presentes, y el amor que compartían como familia se sentía en el aire. Después de que las lágrimas de felicidad se secaron, Félix se acercó a Sophie y la abrazó con ternura, agradecido por el hermoso mensaje que había dado.
La ceremonia continuó con emoción, y finalmente llegó el momento más esperado: el beso que sellaba su compromiso. Samantha y Félix se besaron con pasión, mientras todos los presentes aplaudían y vitoreaban por el amor que irradiaba la pareja y la hermosa familia que estaban formando.
Después de la ceremonia, durante la recepción, Sophie se sentía orgullosa y feliz de haber sido parte importante de la boda de sus padres. Bailó junto a ellos en la pista de baile y disfrutó cada momento de la celebración
Esa noche, cuando la luna brillaba en el cielo y las estrellas se asomaban tímidamente, Samantha, Félix y Sophie compartieron un momento especial juntos. Se abrazaron con cariño, sabiendo que su amor era inquebrantable y que estaban comenzando una nueva etapa como una familia unida.
...
En el paraíso tropical donde Samantha y Félix habían decidido pasar su luna de miel, el tiempo parecía detenerse mientras se sumergían en la magia del amor y la belleza de la naturaleza. Un suave aroma a flores exóticas flotaba en el aire mientras caminaban por la playa, disfrutando de la cálida brisa que acariciaba sus rostros.
Cada día era una nueva aventura para la pareja recién casada. Juntos, exploraron los misteriosos bosques tropicales, descubriendo cascadas escondidas y nadando en aguas cristalinas. Rieron mientras intentaban surfear en las olas y disfrutaron de interminables puestas de sol pintando el horizonte con tonos dorados y naranjas.
En las noches, el cielo se llenaba de estrellas brillantes, y Samantha y Félix compartían momentos íntimos y románticos bajo el manto celestial. Se tomaban de las manos mientras paseaban por la playa, intercambiando dulces palabras de amor y promesas para su futuro juntos.
En una noche en particular, decidieron tomar un paseo en un bote pequeño y navegaban mar adentro. El agua se reflejaba como un espejo y, rodeados de la serenidad de la noche, se miraron profundamente a los ojos.
—Samantha, nunca pensé que podría amar a alguien como te amo a ti—dijo Félix, acariciando suavemente su mejilla.
—Soy la mujer más afortunada del mundo por tenerte en mi vida, Félix. Eres mi amor, mi amigo, mi compañero de vida—respondió Samantha con emoción en su voz.
Juntos, se prometieron mantener esa chispa de amor y conexión siempre viva, sin importar los desafíos que la vida pudiera presentarles. Se dieron cuenta de que el amor que compartían era como un fuego que ardería para siempre, y estaban decididos a cuidarlo y nutrirlo en cada paso de su camino juntos.
Cada día en la luna de miel era una nueva oportunidad para profundizar su amor y fortalecer su unión. Y mientras los días pasaban volando, sabían que esta experiencia mágica solo era el comienzo de una vida llena de aventuras, risas, y un amor que crecería más fuerte con cada día que pasara.
Así, mientras el sol se ocultaba en el horizonte dorado de la isla, Samantha y Félix se abrazaron, agradeciendo a la vida por haberlos unido y sabiendo que esta luna de miel marcaría el inicio de un capítulo lleno de amor y felicidad para siempre.
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-ˏˋ⋆ Trazos en la ciudad de las luces ⋆ˊˎ- Riverduccion
FanfictionDos amantes de la infancia se separaron trágicamente. Años después, se reencuentran inesperadamente en París, la Ciudad de las Luces, donde una serie de coincidencias los lleva a preguntarse si el destino les está dando una segunda oportunidad.