Una Pareja Dispareja (Ambrosius x Ballister)

17. Adultos Hechos y Derechos. (En la ducha)

Ducharse juntos a estas alturas de su relación no era extraño, ambos se conocían a la perfección.

Y ya no eran adolescentes hormonales que se incomodaban por pensamientos fuera de lugar o se excitaban haciéndolos avergonzarse.

Eran adultos hechos y derechos que no cedian fácilmente a sus impulsos y deseos...

¿Verdad?

-¡Ah! Am-¡Ambrosius! ¡Es-mm- Espera! Vas muy... ah... rapido-

El moreno se encontraba sosteniéndose con su único brazo de la pared resbalosa por el vapor que había dentro del pequeño cuarto mientras el agua que salía de la regadera mojaba por completo sus cuerpos.

El rubio estaba ansioso, desde que había visto a su novio desvestirse frente a él para darse una ducha, sabía que no se iba a contener en lo mas minimo.

Y cuando el moreno menos pensó ya tenía dentro al de tez clara embistiendolo con fuerza y fiereza.

Su cuerpo estaba adolorido, habían tenido un pequeño combate de entrenamiento, ambos ahora que ya se habían graduado como caballeros y no tenían demasiada acción en las calles, odiarian perder su buena condición física.

Ambos llegaron exhaustos, pero parece que a Ambrosius le quedaban muchas energías aún...

Las piernas del de bigote comenzaban a flaquear, no resistiría mucho de pie.

Por lo que lentamente fue bajando hasta quedar de rodillas en el piso, aún con su ante brazo apoyado en la pared y su mejilla la dejo descansar también en la pared húmeda.

Ambrosius descendió con el cuando lo vio bajar para no tener que salirse de aquel lugar tan cálido y puso su mano en la espalda cerca del cuello del de cabello negro para empujarlo contra la pared mientras el aumentaba el ritmo con fuerza.

Ballister se sentía abrumado.

Esa sensación placentera que le recorría el cuerpo como una descarga que erizaba todos los vellos de su cuerpo, el hecho de sentirse aplastado contra la pared mientras su miembro se encontraba contra ésta.

Apoyado en su mejilla en la pared, bajo su brazo hacia su miembro y comenzó a dar un rápido y desesperado bombeo.

El rubio al ver ésto sonrió y aumentó el ritmo, aprisionando totalmente el cuerpo del más bajo dejándolo inmóvil mientras arremetia con fuerza y brutalidad sin mover un solo  centímetro del cuerpo del otro.

Ballister sentía que se partia en dos, se sentía tan lleno y el agua caliente callendo sobre sus cuerpos hacia más satisfactoria y acalorada la situación.

Se sentía sofocado por el calor, como si en cualquier momento se fuera a derretir,

Se sentían tan cerca.

Cuando el moreno termino, echó su cabeza hacia atrás abriendo la boca para soltar un último grito, gracias a que se echó hacia atrás su cabeza calló en el hombro del rubio haciendo que su espalda quedara pegada al pecho de Ambrosius.

Mientras que éste continuo moviéndose con fuerza mientras gemia y jadeaba cerca del oído de Ballister, cuando terminó jadeo y suspiró feliz y satisfecho mientras besaba una de las mejillas mojadas.

Cuando salió de él y vio como el semen que salía escurría hasta el piso y se mezclaba con el agua, ayudó al otro a levantarse. Pero en cuanto lo soltó sus piernas temblaron y estuvo a punto de caer de rodillas si tan solo Ambrosius no le hubiera sostenido.

Lo tomó por los muslos y lo levantó cargandolo como costal de papas pero un poco más abajo sin llegar a tener su abdomen en los hombros, simplemente el pecho.

Se metió de lleno debajo de los chorros de agua que caían y aprovechando la posición y que ballister no estaba viendo que hacía, con sus manos (y confiando en que Ballister se sostuviera por su cuenta un rato) separó los trozos de carne que cubrían la entrada y metió dos dedos mojados por el agua.

Ballister tembló.

Comenzó a abrir los dedos y a jalar hacia afuera sacando el semen de dentro con ayuda del agua que casi caía directo.

Una vez lo sintió completamente limpio dentro, tomó el estropajo y le puso jabón para comenzar a limpiar todo el cuerpo del contrario.

Después y bajo de sus brazos y lo ayudo para que se sostuviera de la pared mientras el se limpiaba, todo bajo la atenta mirada oscura.

Al terminar ambos salieron y se secaron y vistieron.

Sin duda alguna que quedarían acostados el resto del día en la cama.

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Día #17: En la ducha. ✔️