30 días OTP +18 de esta hermosa y singular pareja.
Imagen de la portada no me pertenece, créditos a su respectivo artista.
Con respeto, siempre y en todo momento.
Si no te gusta mi contenido o la pareja, no lo leas y ya.
Ellos nunca habían sido muy fans realmente de cosas "extras" a la hora de tener sexo.
No era que no lo disfrutarán tanto como si no las hubiera, si no más bien, les molestaba andar procurando cosas. Se les hacia mucho más sencillo simplemente besarse y avanzar hasta hacerlo que tener que poner una pequeña pausa para ir en busca de esos objetos.
Y con esos objetos me refiero a los famosos juguetes sexuales.
Pero, a pesar de esto, no quería decir que de vez en cuando no probaran cosas nuevas.
Y esta ocasión era así.
-¡Jmm! Ah... ¡Mmm!- el moreno tenia em dorso de su mano intentando contener los gemidos que se escapaban de su garganta.
El rubio se encontraba sobre el, apoyado en sus rodillas mientras tenía un vibrador dentro del contrario, a su vez tenía un juguete un poco más peculiar en el miembro de su pareja, lo cubría y apretaba mientras lo movía de arriba a abajo.
El moreno tenia los ojos llorosos debido a la sobre estimulacion que estaba sintiendo. Cada vez sentía que perdía más la cabeza.
-jmm A-Ambrosius...p-porfavor... d-deja ¡ah! ¡tsss agmm! ¡Deja que me corra!- gemia entrecortado y desesperado.
El rubio simplemente sonrió.
-aguanta un poco más, Bal...- y dicho esto con su mano comenzó a meter y sacar el vibrador mientras con su otra mano movía más rápido el juguete.
-¡Ah! ¡N-no! ¡Es-Espera! ¡Angh!- el moreno arqueó la espalda tanto como pudo.
Sus manos se encontraban atadas con una soga un poco larga que iba desde el respaldo de la cama hasta sus muñecas.
A Ambrosius le encantaba verlo así.
Después de unos segundos, quitó el juguete que estaba en el miembro del contrario y también el vibrador, permitiendole terminar.
En cuanto llego al clímax, dejó caer todo su peso en la cama intentando recuperar el aire.
Ambrosius se colocó entre sus piernas y subió ambas hasta sus hombros permitiendole tanto una buena vista, como un buen ángulo.
-ah... am-amor... ¿Q-Qué estas...?-
-Aún no terminamos, Bal- y sonrió
Sin ningun problema alineó e introdujo su miembro dentro del más bajo.
-¡Ah!-
Con un poco de esfuerzo para no moverse demasiado dentro de él de cabello negro, llegó con su brazo a una caja que se encontraba en la mesita de noche y de ahí saco un pequeño juguete, era delgado y de metal con unos pequeños bultos y un anillo en la parte superior para poder sacarlo con facilidad, con cuidado lo introdujo dentro del pequeño orificio del miembro de Ballister.
-Tss ¡AH! ¡N-NO! MIERDA- grito desesperado el moreno al sentirse invadido en esa parte.
Sentía que explotaría en cualquier momento.
Su interior también se contrajo tanto que hizo a Ambrosius suspirar en una mueca por el abrazador calor que lo rodeaba.
La espalda de Ballister se arqueaba en momentos con fuerza mientras gritaba de placer y dolor.
-AH, N-NO... ¡AM-AMOR! ¡P-PORFAVOR!- Escucharlo suplicar y jadear excitaba aun más al rubio que no paraba de moverse con rapidez y precisión buscando el clímax.
La sensación que tenía Ballister era extraña, sentía que quería, no, que TENIA que correrse y no podía, y no solo eso, si no que era un manojo de sentimientos extraños al sentirse invadido.
Una cosa era cuando Ambrosius tapaba el orificio de su miembro con un dedo para que no se corriera, y otra mucho más extraña era la que estaba sintiendo al tener algo metido dentro de ese orificio.
No sabia en que momento su novio había comprado tal cosa, pero estaba seguro de que su rubio intentaba matarlo de la desesperación, incomodidad, dolor y placer.
Solo podía gemir y jadear como nunca lo habia hecho al ritmo de las embestidas.
No supo en qué momento su novio terminó dentro, pero cuando sintió que salió de él y quitó ese artefacto del demonio del orificio de su pene y por fin pudo correrse se sintió en el jodido cielo.
Ambrosius lo miraba guardando cada detalle del moreno en su mente.
Ballister apretaba los ojos en busca de controlar su respiración, no se dio cuenta cuando el rubio lo libero de la cuerda pero podía ver sus muñecas magulladas de cuando su cuerpo reaccionaba intentando liberarse.
Se sentía mucho más sensible de lo habitual, sentía su miembro palpitar adolorido de tan intenso orgasmo, y sentía el semen salía de su entrada.
-Amor... ¿Estas bien?-
-Ahora si preguntas, ¿verdad, idiota?-
Ambrosius soltó una ligera risita ante el tono enfadado y entrecortado de Ballister.
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Día #20: Ruidoso y Exagerado.✔️
¿Alguna vez han leído BJ Alex?
Si su respuesta es que si, seguro reconocerán esto:
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Este juguete es uno que se pone en el orificio del miembro masculino (por si no lo conocían o mi descripción en la historia no fue la mejor) y el cual yo conocí gracias a BJ Alex, me impacto mucho que algo así existiera y a decir verdad tenía ganas de ponerlo en algún capitulo de esta historia.
