𝟎𝟏𝟓

596 80 5
                                    

Juan apretó fuerte a Auron en su abrazo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



Juan apretó fuerte a Auron en su abrazo.

Lo soltó para estrujar sus mejillas, recibiendo una mirada de molestia por parte del más bajo.

— Sigues igual de adorable que cuando nos conocimos. — Dijo con una risa.

La voz de Juan había cambiado drásticamente en el año que llevaban conociéndose.

También había crecido bastante, pero no solo en estatura.

Sus hombros se habían hecho más amplios y ya no tenía cara de niño. Aunque seguía siendo el mismo chico infantil de siempre.

— ¿Por qué no me sorprende?. — Dijo, viendo la cabellera ahora castaña de Reborn detrás de Auron. — Lindo look para un chico aún más lindo. — Halagó, dedicándole un guiño y ganándose un ceño fruncido por parte del mudo, y una mueca de asco por parte del nuevo castaño.

— Me disgustas. — Dijo Reborn, pasando a su lado para entrar a su casa.

— Me amas. — Replicó Juan, cerrando la puerta.

— No. — Reborn repitió la misma cara de asco.

— Es cierto, no tengo oportunidad. — Juan hizo una mueca triste. — Tú solo amas a Auron.

Reborn no respondió, pero notó la mirada de Auron sobre él, y cómo Juan comenzó a sonreír cada vez más ante el silencio.

— Las clases de teatro te hicieron más raro de lo que ya eres. — Comentó Reborn, solo para decir algo.

— Qué brutal cambio de tema.

Los recién llegados se voltearon para ver a Iván, que venía tirando de sus ruedas desde la cocina.

Los cuatro se habían hecho muy unidos desde aquel primer día.

Hacía casi un año de amistad, y solían juntarse cada fin de semana y durante las vacaciones.

Cada uno había ido a una rama distinta del arte, aunque compartían algunas cosas.

Auron se había concentrado más que nada en la danza, contemporánea, específicamente, y tomaba clases de dibujo, aunque solo para compartir con Iván, algo que tenía fascinado al pelinegro.

Juan tomaba clases de saxofón, y había comenzado teatro.

Por su lado, Reborn se había centrado más en cantar, y también tomó un taller de composición que habían abierto hace poco.

Los cuatro iban a clases de práctica coral, aunque Auron solo iba para escucharlos.

Tanto Reborn como Juan, eran muy buenos cantando.

Iván no tanto y eso le daba cierta gracia, pero su amigo tenía el cierto gusto en el rap, aunque no iba mucho con la clase.

Podía decir que tenía más amigos. Incluso, se llevaban muy bien con el director, aunque no se juntaban mucho para mantener cierto formalismo escolar.

Pero Pato era tan maduro como ellos la mayoría del tiempo.

Nadie se había metido con Auron desde que habían entrado.

Todo el mundo lo trataba tan bien, y Reborn estaba feliz por él.

Había encontrado un punto cálido en el mundo que no trataría de apagar al chico, al contrario, Auron brillaba todos los días en ese lugar.

Aunque por un lado, sentía que eso lo alejaba un poco de Auron.

Ya no tenía que protegerlo, porque nadie le haría daño, y porque habían otras personas que lo protegerían también.

A pesar de eso, el chico seguía a su lado, sentándose junto a él en el patio del colegio.

Acurrucándose contra él cuando Reborn ponía una película de miedo para ver, y a veces, durmiendo en sus piernas cuando se tiraban en el patio solo para no decir nada.

A pesar de todo, seguían al lado del otro.

A pesar de todo, seguían al lado del otro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝐌𝐔𝐓𝐄  ⭑  𝐑𝐄𝐁𝐎𝐑𝐍𝐏𝐋𝐀𝐘  ¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora