𝟎𝟖𝟖

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Al día siguiente, la señora Álvarez los despertó temprano para que prepararan sus cosas rápido, ya que irían a ver al médico de Auron a Cataluña

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Al día siguiente, la señora Álvarez los despertó temprano para que prepararan sus cosas rápido, ya que irían a ver al médico de Auron a Cataluña.

Había conseguido turno ese mismo día debido al sorpresivo regreso de su voz, y debía revisarlo urgentemente.

La idea era ir y volver el mismo día, pero por si acaso, debían llevar una muda de ropa por si se les hacía muy tarde.

Reborn se encargó de guardar la ropa de ambos, mientras Auron se vestía, y aún algo adormecido, el castaño pudo notar su nerviosismo.

Reborn enganchó la mochila de un lado a su hombro, sentándose junto a Auron y tomando su mano para que el menor lo mirara.

— ¿Estás bien?. — Preguntó con suavidad.

Auron asintió automáticamente, pero no convenció del todo a su novio.

Reborn pasó un brazo sobre los hombros del chico, abrazándolo.

— Estoy contigo bebé. No te preocupes. — Habló cerca de su oído. — Ven, desayunemos.

Bajaron las escaleras juntos, incluso cuando estaban tomando su café, por parte de Reborn, y su chocolatada fría, por parte de Auron, el castaño no dejó de sostener su mano.

Ya en el auto, compartieron auriculares.

Auron se acomodó sobre su hombro con intenciones de seguir durmiendo.

Nadie se lo impidió, ni siquiera la alegre canción que se estaba reproduciendo a todo volumen en ese momento.

Nadie se lo impidió, ni siquiera la alegre canción que se estaba reproduciendo a todo volumen en ese momento

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𝐌𝐔𝐓𝐄  ⭑  𝐑𝐄𝐁𝐎𝐑𝐍𝐏𝐋𝐀𝐘  ¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora