Regreso a la casa I

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—Joven, por favor despierte, estamos cerca.

Futaro no lograba entender lo que sucedía, pero se daba cuenta de que estaba detrás de un auto por la radio que se escuchaba y el tejado que observaba estando tirado.

—Señorita, ¿está segura de que este es el lugar? La verdad es que la zona es peligrosa —se refería el conductor a la persona que estaba a su costado.

—Sí, esa es su ubicación —se escuchó la voz de Itsuki.

Impresionándola lo lejos que se encuentra su casa de la escuela y donde pretende enseñar.

Impresionándola lo lejos que se encuentra su casa de la escuela y donde pretende enseñar

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—Por fin te despiertas, te vi agonizando por las escaleras. Miku decidió llamar a un taxi, pero asumí la responsabilidad de llevarte.

—Muchas gracias por tu amabilidad.

—¿Qué pasó?

Futaro no recordaba lo que sucedió en esos minutos finales en su hogar. Al observar que ella sostenía una botella de agua, recordó de manera instantánea lo que había sucedido.

—¡Nino! Esa maldita me drogó o algo parecido.

—Lamento mucho su comportamiento, no le agrada que otras personas se acerquen a nosotras —buscando una manera de justificar lo que había hecho su hermana.

—En fin, ya llegamos —expresó Futaro al ver que se encontraban a las afueras de su hogar.

—Serán 10 dólares —dijo el taxista.

—¡Es demasiado caro, no tengo esa cantidad! —alterándose por no saber cómo pagarle.

—No te preocupes, yo pagaré.

—Muchas gracias, te lo pagaré más adelante —preocupado por otra deuda que tendría que pagar.

Al observar la casa de Futaro por la ventana de la puerta, notó lo pequeña que era su residencia

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Al observar la casa de Futaro por la ventana de la puerta, notó lo pequeña que era su residencia. En la entrada se veía una compuerta y arriba un letrero con su apellido. Parecía haber sido un restaurante, pero se veía que estaba cerrado por mucho tiempo.

Quintillizas Vol 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora