Futaro es un joven estudiante que solo se centra en los estudios, esto le provocó ser el mejor estudiante de los institutos más difíciles de Japón, resulta proveniente de una familia de bajos recursos económicos. Un día, un millonario al ver el exce...
Apenas quitó el seguro y abrió la puerta, notó la presencia de una persona vestida con traje.
—Seré directo contigo, Isanaro. ¿Tienes el dinero? —preguntó Hisoben.
—Un placer verte de nuevo, Hisoben. No tengo el dinero, pero te prometo que te lo daré en los próximos meses —respondió Isanaro, tratando de aliviar la tensión con una risa.
—¿De verdad esperas que te crea? —preguntó Hisoben, golpeándolo repentinamente en el estómago.
—¡Me dijiste lo mismo el mes pasado!
—¡Deja en paz a mi padre! —exclamó Futaro al ver a su padre tirado en el suelo y escuchar a su hermana llorando detrás del baño.
—¿Ah, sí? ¿Y dónde conseguirás los 100,000 dólares que tu familia me debe? —preguntó Hisoben.
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—Conseguí trabajo, dame un mes por favor —suplicó Futaro, pidiéndole una nueva oportunidad.
Hisoben notó la presencia de Itsuki detrás de Futaro, temblando por todo lo sucedido.
—La muchacha que estás tratando de esconder es realmente hermosa. Podría reducir tu deuda si me la prestas. —dijo Hisoben, imaginándose cosas perversas con ella.
Futaro notó a Itsuki llorando detrás de él. Parecía que nunca antes había estado en este tipo de situaciones en su vida.
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—No te la daré, maldito enfermo. Prefiero pagar hasta el último centavo antes de que la toques. —recordando las palabras de su hermana de proteger a Itsuki de todo peligro.
Pese al momento incómodo, ella se avergonzó por su comentario.
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