Previo a la boda V

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Faltaban 6 horas para la boda y los preparativos estaban comenzando: carteles, decoraciones y otros detalles para la boda más esperada del momento. Una de las integrantes de la familia Nakano, una de las más acaudaladas de Japón, se uniría en matrimonio con un miembro de la familia Uesugi.

 Una de las integrantes de la familia Nakano, una de las más acaudaladas de Japón, se uniría en matrimonio con un miembro de la familia Uesugi

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Futaro regresó a su habitación temiendo que su futura esposa descubriera que había olvidado los anillos. Solo su asistente sabía de ello, pero su enojo por haberse olvidado algo tan importante llevó a que se lo contara a las asistentes de la novia, lo que provocó que se corriera el rumor de que Futaro había olvidado los anillos.

Mientras las asistentes arreglaban el cabello de la novia, no podían evitar susurrar sobre el rumor.

— Pobre chica, no sabe que se va a casar con alguien irresponsable.

— Es una lástima que alguien tan hermosa tenga que casarse con alguien así.

A pesar de que sus murmullos eran apenas audibles desde la distancia, la novia los escuchó

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A pesar de que sus murmullos eran apenas audibles desde la distancia, la novia los escuchó.

— Oigan, chicas —dijo la futura esposa.

— Díganos, su majestad.

— Dejen de hablar así de mi futuro marido.

— Disculpe, su majestad —dijeron las asistentes, y siguieron arreglando su cabello.

Más tarde, la asistente personal de Futaro se dio cuenta de que el rumor se había propagado y se sentía culpable

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Más tarde, la asistente personal de Futaro se dio cuenta de que el rumor se había propagado y se sentía culpable.

— Joven Futaro, discúlpeme, le conté a una de las asistentes de su esposa que se había olvidado los anillos y esto provocó que se corriera la voz hasta llegar a los oídos de su esposa.

— Maldición, ¿qué pensará de mí? —comentó desesperado.

— No se preocupe, puedo decirles que todo fue una mentira y listo.

En ese momento, Futaro recordó lo peligroso que podía ser una mentira. Todas las chicas con las que había tratado habían mentido alguna vez, pero había una que era especial por ser una mala mentirosa.

— Mejor no digas nada, mi hermana y mi padre están en camino —dijo con una sonrisa.

— Lo entiendo, si me disculpa, iré a ver cómo va el buffet y si los chefs ya están cocinando —se fue de la habitación

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— Lo entiendo, si me disculpa, iré a ver cómo va el buffet y si los chefs ya están cocinando —se fue de la habitación.

Futaro presentía que tardarían en llegar porque eran tacaños y no querían pagar un taxi, por lo que decidió volver a dormir.

Futaro presentía que tardarían en llegar porque eran tacaños y no querían pagar un taxi, por lo que decidió volver a dormir

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Quintillizas Vol 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora