ROTO

Capítulo 11: TimeTay

Time llevaba horas esperando al rubio, su novio no despertaba y en algún memento el monitor comenzó a sonar, Tay se movía inquieto, por lo que Time tomó fuerte su mano y le hablo dulcemente al oído. Pareció funcionar porque su novio se tranquilizó.

Time se sentó de nuevo y apoyo la cabeza en la cama.

— Por favor, despierta amor —Tay se removió un poco y el mayor acarició su mano—, aquí estoy cariño, solo vuelve a mí.

— T... Ti... Time...

— Si bebe —Time abrió los ojos lentamente y Time tomó un vaso con agua para darle con un pajita—, cariño toma un poco de agua.

— Sí... —Time bebió y miro alrededor—, ¿los chicos?

— Están bien, no te preocupes ahora —Time acarició la mejilla de Tay—, tenía tanto miedo de perderte.

— Time... estoy bien.

— ¿Cómo dices eso?, tiene una herida en el estomago y vendaje en varias partes.

— Pero estoy vivo y eso importa —Time colocó mala cara—, me preocupan los demás, Pete estaba muy mal.

— Están ambos fuera de peligro —Time se sentó de nuevo—, explícame el motivo por el cual no pude contarme contigo y no obtuve la ubicación del celular.

— Pues... me quiero sentar —Time se levantó para ayudarlo con las almohadas y Tay aprovecho de abrazarlo por la cintura, el mayo lo abrazó devuelta—, necesitaba respirar tu arom... Time tienes un olor extraño.

— Pues... —Time se separó y Tay lo miró severo—, no me veas así, sabes que salí con los chicos.

— Sí, pero ese olor que traes no es precisamente del club.

— ¿podemos hablar de eso después?, estás mal herido y además debes contarme que pasó.

— No te diré nada si no me explicas primero.

— Está bien —Time había decidido ir con la verdad, no quería volver a perder a Tay. Le contó todo lo que paso en el club.

— Así que bailarines —Tay tenía una expresión molesta—, de verdad piensas que voy a creerte que no pasó nada con el chico.

— Es verdad Tay, rescatamos a Kinn...

— Entonces esa es tu excusa, si no Kinn no hubiese estado mal no estarías aquí —Tay tenía los ojos llenos de lágrimas—, estarías en la cama de un hotel...

— Por dios Tay, basta.

— Quiero creerte, pero... vete.

— No me iré hasta solucionar esto.

— ¡QUE TE VAYAS! —Tay se aferró a su abdomen el cual dolió al gritar.

— Sé que no confías en mi, pero estoy dando lo mejor para cambiar —Tay volteó el rostro hacia la ventana—, iré por un café y volveré después.

Time salió y Tay intentó acomodarse hacia un costado para mirar el cielo de fuera, como una especie de película pasaron por su cabeza todas aquellas noches en las cuales espero a Time mientras se acostaba con otras personas.

— ¿no puedes solo amarme a mi? ¿Por qué me retienes? ¿Por qué me sigues prometiendo cosas que no cumples?

Tay lloró un momento y luego cerró los ojos para intentar dormir un poco, Time estaba fuera de la habitación tomando un café, espero un momento y entró de nuevo. Vio a Tay abrazado a una almohada la cual estaba mojada. Se sentó en la silla y acarició la cabeza de su novio.