T/N Black

Cap. 13

Theo: t/n... —ambos nos mirábamos.

Esos ojos, ese brillo...

Arweny: ¿Es ella? —dijo levantando la cabeza mirando a su amo— ¿es t/n...?

Theo: Riddle —terminó por ella mientras ampliaba su sonrisa.

t/n: Black en realidad —le corregí, sonreí a la elfina que me miraba con unos enormes ojos brillantes.

Theo: Por supuesto —aún me miraba sin creerlo. Yo sonreí nerviosa.

Oh Merlin.

¿En qué me estoy metiendo?

Theo: Adelante —reaccionó abriendo más la puerta y haciéndose a un lado—, entra, no te quedes ahí.

t/n: Gracias —dije casi en susurros asintiendo la cabeza y volví apretar mi bolso para entrar a la mansión.

Theo y su elfina comenzaron a guiarme hacia la sala de estar, la mansión tenía colores parecidos al de los Malfoy, pero el ambiente era más agradable, más cálido.

Elfina: ¿Le ofrecemos algo de tomar? —hablaba animadamente mientras caminábamos— ¿De comer? ¿Algún aperitivo?

t/n: Que amable, pero no gracias —intente sonreír.

Estaba muy nerviosa, Arweny era la única que hablaba, casi brincaba, mientras caminábamos transmitía una vibra tan linda.

Theo: Prepara té, por favor Arweny —ella se inclino y se desvió a la cocina.

Llegamos a la sala de estar, no era tan diferente a la mía, tenía una linda sala, cuadros hermosos, un piano.

Yo me senté en uno de los sillones grandes y Theo en el individual, Arweny no tardó en llegar con el té, lo preparo y volvió a dejarnos solos.

Theo: ¿Cuál es el motivo del honor de tu visita? —habló después de un silencio tomando su taza de té.

t/n: Mi padre... —me miró— Quien-tu-sabes —aclare y él asintió.

Theo: Entonces, ¿Tu padre biológico es...? —me miraba con curiosidad.

t/n: Sirius Black —abrió los ojos con impresión—, es algo complicado, lo sé.

Theo: Si me imagino —bebió un sobró de té.

t/n: No sé que hago aquí —le confesé—, me dio esta dirección sin tener conocimiento de nada —volvió asentir.

Hubo otro corto silencio.

Theo: Según tengo entendido sabe que mis padres aún no regresan, no sé para que te mandaría aquí.

Tal vez me esta probando...

t/n: ¿Desde cuando llegaste? —me arme de valor para preguntarle, mi pierna temblaba un poco.

Theo: Hace una semana —asentí mordiendo el interior de mis mejillas—. Disculpa por el cambio repentino de tema, pero estoy maravillado de que hayas venido.

Sus ojos brillaron más, yo sentí mis mejillas arder.

¿En serio aún tenía ese efecto en mi?

Theo: Recibiste mi nota, ¿verdad? —me miro con suma atención.

t/n: Claro, no es que Daphne me haya hecho una escena en el Gran Comedor —apretó los dientes formando una mueca.

Theo: Disculpa eso, pero, a veces ella está un poco fuera de lugar —no pude evitar soltar una pequeña risa—. Y disculpa también por estar tan incomunicado, pero ya sabes, ocurrieron cosas con tu padre, —se dio cuenta de su error y quiso retractarse— digo con...