Cap.32

407 47 1
                                    

Elizabeth Weasley

Dormía profundamente esperando que nadie interrumpiera mi momentos más preciado del día y la noche.

Lástima...

Despierten... ¡Ronald, Elizabeth! ¡Despierten!— Gritaba una molesta voz

Apenas abrí los ojos y ya quería volver a cerrarlos volviendo a acomodarme en una posición demasiado cómoda

—¿Que haces aquí?—Murmuro un adormilado Ron antes de volver a cubrirse

—Rapido, vistanse, y no se vuelvan a dormir. ¡Levántate Ron! ¡Despierta, Elizabeth! ¡Su madre dice que el desayuno ya está listo!— Exclamó con molestia

«¿Que demonios estoy pagando?»

Por suerte Granger salió de la habitación. Yo me volví a acurrucar siendo poco consiente de lo que sucedía a mi alrededor.

Pasaron aproximadamente unos minutos antes de que fuera esta vez mi madre quien entrará dando sus usuales gritos...

No nos quedó de otra a Ron y a mi que hacerles caso y levantarnos para alistar nos a una hora considerablemente temprana.

Al salir de la habitación con demasiado sueño bajamos encontrando a los demás ya desayunando

—Buenos días— saludo Potter

—Buenas madrugadas, querrás decir— Murmuramos Ron y yo

Era una de las cosas que teníamos en común por ser mellizos... A ambos nos gusta dormir

Terminamos de desayunar y después de eunos minutos por órdenes de papá salimos de la casa para emprender un largo camino

—¿A donde vamos?— Preguntó Potter desde atrás

—No lo sé, ¡Oye, papá! ¿A donde vamos?—Pregunto mi mellizo

—No tengo idea. No se separen — Ordenó

—¿Papá? ¿Por que venimos caminando? ¿No pudimos ir por otro camino? Algo menos... Largo —Me quejé

—Lo lamento, pecosa pero ya vamos tarde porque ustedes no se quisieron levantar temprano, y este es el único camino —Responde sin mirarme

—¿Más temprano de lo que ya es?— Pregunta dramático Ron

Bueno no tan dramático, yo pensé lo mismo

Luego de un rato más avanzando un hombre apareció delante de nosotros saludando a papá

—¡Arthur! ¡Ya era hora de que llegaran!— Saludo

—Lo siento, Amos. Pero hubo algunos que se quedaron dormidos — Volteo a vernos a Ron y a mi— Él es Amos Diggory, muchachos. Trabaja conmigo en el Ministerio

Al terminar de presentarlo un chico alto, castaño y pálido salto de un árbol sorprendiéndonos

—Y este apuesto muchacho debe de ser Cédric ¿Cierto?—Pregunto papá

—Si, señor —Respondió el chico mirándonos sonriente

—Por, acá —Hizo un además el señor Diggory

Nosotros solo seguimos a los adultos. Fred y George se acercaron a mi solo para darme un codazo cada uno

—Auch... ¡Oigan! ¿Y eso por que? — Pregunté quejándome

—¿Viste como te miro?— preguntó Fred

—¿De que rayos hablan?— Pregunto confundida

—Diggory tiene los ojos en ti —Me dice George haciendo que voltee mirando al chico que efectivamente me está mirando

La serpiente de los Weasley (Draco Malfoy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora