Historia basada sobre Suguru Geto, completamente alejada de la realidad del manga/anime de Jujutsu Kaisen por lo tanto no se encontraran spoilers de ningun tipo.
Disfruten la lectura :)
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Suguru se asomó por la puerta, se secaba las manos con un paño de loza, al instante su cuerpo se tensó viendo directamente a Satoru y luego a ____________. Cada musculo de su cuerpo estaba contraído y los nervios aparecieron causándole un poco de sudoración en la frente sin embargo se animó a caminar hasta la puerta mientras dejaba el paño que andaba trayendo sobre una mesa en el camino.
- ¿Qué hacen aquí? -Preguntó de inmediato, la muchacha estaba viendo el suelo, por un momento no fue capaz de verlo a la cara-
-Hola Suguru -habló Gojo, el pelinegro sólo le elevó la barbilla- Eh...
-Necesito hablar contigo, pero creo que es un mal momento -interrumpió ___________ llamando la atención de ambos jóvenes, esta vez si había elevado la mirada y veía a Geto directamente- Voy a venir otro día -Estaba a punto de darse la vuelta, tomar el brazo de Satoru e irse de allí, pero fue detenida-
-No tengo problema en hablar ahora -Mencionó el pelinegro con calma observando a la chica, luego desvió la mirada hacía su amigo albino- ¿Puedes quedarte con Akane un momento?
-Si -Asintió Gojo. ¿Akane? Así se llamaba, pensó ____________ pero que sería de él, tan rápido estaría con alguien más, era tan fácil reemplazarla. Negó con la cabeza quitándose aquellos pensamientos, que a pesar de causarle muchas dudas no tenía ningún tipo de derecho a reclamarle nada, al fin y al cabo, ellos no eran nada.
-Vamos a la azotea, nadie nos molestará ahí -Pronunció y comenzó a caminar. ____________ lo siguió en silencio mientras le observaba la espalda. Andaba vestido con una camiseta blanca y un pantalón de buzo color negro, traía el cabello suelto sin su chongo, estaba bastante casual y cómodo. Al subir en el ascensor y luego salir, ingresaron a una escalera de emergencias donde se encontraba una puerta de metal, Suguru la abrió y el viento del exterior entró inmediatamente. Ambos salieron y el aire les azotaba a ambos la cabellera. Se acercaron a la orilla del edificio delimitado por una baranda, la ciudad estaba completamente iluminada, desde esa altura la joven se pudo percatar de que Tokio era mucho más grande de lo que pensaba, cada rincón que mirara había una pequeña luz iluminando cada casa de la ciudad.
Pasaron unos cuantos minutos en silencio, Suguru coloco sus manos en los bolsillos, mientras ella planeaba en como iniciar la conversación y no se le ocurría nada.
- ¿Quién es ella? -preguntó de inmediato antes de comenzar la otra conversación. Suguru sonrió disimuladamente-
-Es una pariente, viene por un par de semanas a Tokio y se va a quedar en mi departamento -confirmó, en el fondo la chica sintió alivio al escuchar eso, pero si hubiera dicho otra cosa no tendría ningún tipo de derecho a reclamo-
- ¿Satoru la conoce? -Suguru la vio por el rabillo de sus ojos-
-Así es -finalizó y nuevamente hubo silencio, sin embargo, el pelinegro inició nuevamente la conversación- ¿De qué quieres hablar?
___________ tomó su teléfono celular buscando algo y con cuidado lo acercó hasta él dejando ver una foto de Megumi, Geto la observó sin entender, luego la miró a ella que tenía una pequeña sonrisa.
-El es Megumi -pronunció, Suguru la observaba con duda- Fushiguro Megumi.
Geto abrió levemente los ojos, su boca también se abrió un poco, no estaba entendiendo nada. El de la imagen era un niño, un niño muy parecido a Toji Fushiguro, no sabía que decir, pues su cerebro no tenía reacción alguna.
-Es hijo de Fushiguro Toji -siguió hablando, Suguru se sorprendió aún más. ¿Hijo? ¿De qué se trataba todo esto? -
-Puedes ser más clara, no estoy entendiendo nada -dijo de forma sería-
-El vivirá conmigo a partir de mañana - Ella suspiró pesadamente y comenzó a relatar todo mientras Suguru se mantenía en estado de shock escuchando lo que ella le estaba diciendo. No podía creer lo que estaba escuchando, parecía irreal. En un momento miró a la chica pensando en si realmente la conocía del todo y se dio cuenta que la respuesta era negativa, también se sintió triste ya que era algo oculto que no tuvo el valor de decírselo de manera inmediata, tal vez de esa forma hubiera entendido su comportamiento, pero ahora ya no tenía mucho sentido, al menos no para él porque al parecer ella nunca le tuvo la confianza para hacerlo.
- ¿Por eso no querías alejarte de Toji? -cuestionó inmediatamente, no podía dejar de relacionarlos, mucho menos ahora-
-Esto no lo hago por él, lo hago por Megumi -aseguró la chica de forma firme-
-Pero es su hijo, de todas formas, lo involucra a él -Suguru estaba intentando entender y procesar lo que ella le decía, pero era difícil, su cerebro no estaba siendo capaz de procesar y digerir la información-
-Lo sé, tal vez de esta forma, quizás se haga responsable -En el fondo, ____________ tenía una leve esperanza de que a lo mejor como padre se hiciera cargo de él, tenía la esperanza de que a lo mejor así podría acercarse a él y ser un padre presente, un padre que a lo mejor Megumi siempre necesitó o va a necesitar-
-Junto a ti, claro -Respondió Geto un poco irónico, la muchacha lo miró fijamente, alarmada-
-No -lo frenó de inmediato- yo ni siquiera tengo esas intenciones, deberías tenerlo claro.
-No lo tengo tan claro, tal vez el no piense lo mismo, no confió en él pues ya intento algo contigo...
- ¡Maldición Suguru! ¿¡Por qué no puedes confiar en MI!? ¡Yo te amo a ti, a nadie más! ¡Sé que ahora no estamos juntos y no me importa decírtelo, pero es así y no creo poder dejar de amarte!
-Yo no quería que las cosas terminen así -Suguru la observaba con algo de nostalgia por lo que escuchaba, pero estaba herido-
-Yo tampoco y no quiero volverme la victima con esto, pero ni siquiera creíste en mí, simplemente lo terminaste y ya, todo a la basura por nada es como si yo nunca te hubiera importado, te acabo de decir que te amo y ni siquiera hubo una reacción ante eso -___________ estaba a punto de llorar, pero no dejó que las lágrimas salieran-
-Me amas, pero no tuviste la confianza de contarme algo tan importante como esto -Suguru suspiró pesadamente- realmente espero que con ese pequeño hagas las cosas bien y seas feliz.
Geto Suguru se dio media vuelta dejándola sola en la azotea, en ese momento la chica no resistió mucho y se atacó a llorar mientras se sentaba en el suelo esta vez dándole la espalda a la ciudad iluminada que había estado viendo hace unos cuantos segundos. Abrazada a sus rodillas, escondiendo la cabeza en ellas, sintió unos brazos alrededor de su cuerpo, Satoru había llegado a contenerla.
Este capítulo lo escribí mientras escuchaba Love in the dark de Adele, como recomendación lo pueden hacer igual y bueno eso. ¿Cómo están? espero que muy bien, yo me siento bien también, espero que les guste el capítulo y que disfruten la lectura. También quiero agradecer a todas las personas que se toman el tiempo de comentar, los leo siempre aunque no responda nada y también agradecer a todos los nuevos y viejos lectores que han seguido esta historia. Hoy día me puse un poco sentimental, perdón jajajajaj ya no digo nada más para no extenderme tanto, les mando un corazón <3
