ᴀꜰᴛᴇʀɢʟᴏᴡ ❘ ᴘɪᴇʀʀᴇ ɢᴀꜱʟʏ

031

Giselle's Pov :

Después de la emocionante propuesta, la organización de la boda no se hizo esperar. Decidimos que la fecha sería el 16 de Julio, en el magnífico Hotel du Cap-Eden-Roc en Antibes. Esta elección tenía un significado especial, ya que sería antes del Gran Premio de Francia, una carrera sumamente importante para Pierre, pues corría en su país natal.

Los preparativos para la boda se convirtieron en una experiencia emocionante y abrumadora a la vez. Pero contábamos con la ayuda de un equipo excepcional y nuestras familias y amigos estaban dispuestos a apoyarnos en todo lo que necesitáramos.

Un emocionante giro ocurrió cuando Virginie Viard, la directora creativa de Chanel, se puso en contacto con nosotros. Recordé la sesión de fotos que había hecho con ella durante mi viaje a Qatar y, para mi sorpresa, nos ofreció diseñar mi vestido de novia. ¡Era una oferta que no podía rechazar! ¿Quién no sueña con casarse en un vestido Chanel?

Virginie Viard y Madame Olivia Douchez, las expertas de Chanel, estaban ocupadas dando los últimos toques al diseño del vestido de novia. Me sentía afortunada de estar en manos tan talentosas y confiaba en que el resultado sería espectacular. Para mi sorpresa, no sólo diseñaron mi vestido de boda, sino que también me sorprendieron con otro para la fiesta de la noche. Era como un sueño hecho realidad, cada detalle cuidadosamente considerado.

Para las damas de honor, decidimos que llevarían vestidos negros. Queríamos que todas se sintieran cómodas y hermosas, así que les dimos la libertad de elegir el diseño que más les gustara.

Pierre y yo tomamos una decisión única para mantener el factor sorpresa en la boda. Ya  que él no podía ver mi vestido de novia antes del gran día, acordamos mutuamente que yo tampoco vería su traje. Esta idea nos mantenía emocionados y añadía un toque especial de anticipación al momento de vernos en el altar.

Las semanas pasaron volando mientras nos sumergíamos en la planificación de cada detalle. Pierre y yo estábamos ocupados con nuestras respectivas carreras, pero siempre encontrábamos tiempo para decidir juntos sobre las opciones de la boda. Cada elección era emocionante y significativa, desde los arreglos florales hasta la selección del menú.

La cena de ensayo fue una velada encantadora, organizada con tanto cariño por nuestros padres. Era un momento en el que todos nuestros seres queridos se reunían para celebrar el próximo paso en nuestra vida juntos. Pierre lucía increíble en su esmoquin de Ralph Lauren, irradiando elegancia y confianza. Sus ojos brillaban con anticipación mientras compartíamos risas y anécdotas con nuestros amigos y familiares.

Mi vestido de seda color marfil era una elección que me hacía sentir radiante. El cuello halter y la falda acampanada le daban un toque clásico y atemporal, justo lo que había soñado. Aunque estaba emocionada por el gran día, también me sentía un poco nerviosa. Pero la compañía de Pierre y el apoyo de todos a nuestro alrededor me daban una gran dosis de tranquilidad.

La cena transcurrió de manera armoniosa y alegre. Ríos de risas llenaban el aire mientras compartíamos historias, recordábamos momentos especiales y brindábamos por el futuro que nos esperaba. Ver a nuestras familias y amigos interactuar con tanta alegría y entusiasmo me recordaba cuánto amor teníamos a nuestro alrededor.

Sabía que todos tenían un rol en el gran día, y su compromiso y disposición para hacer que todo saliera perfecto nos llenaban de gratitud. La confianza que teníamos en ellos y en cada detalle que habían preparado nos permitía relajarnos y disfrutar del presente.

A medida que la noche avanzaba y la cena llegaba a su fin, mi corazón se llenaba de gratitud y emoción. Estaba a punto de casarme con el amor de mi vida, rodeada de personas que nos apoyaban y querían. El gran día estaba a la vuelta de la esquina, y con cada momento que pasábamos juntos, sentía que mi amor por Pierre crecía aún más. Estaba lista para dar el siguiente paso en esta increíble aventura que habíamos construido juntos.

La noche antes de la boda fue un torbellino de emociones y sorpresas. Mis queridas damas de honor me organizaron una pijamada en el acogedor Chalet de la finca. Al entrar, fui recibida por una explosión de globos y una atmósfera llena de risas y emoción. Parecía que éramos niñas pequeñas que se emocionaban ante la inminencia del gran día. La mesa estaba llena de mis comidas favoritas y habían preparado varios juegos para disfrutar juntas.

El cariño y apoyo de mis damas de honor eran un recordatorio constante de cuánta suerte tenía de tenerlas en mi vida. A medida que la noche avanzaba, sentía una mezcla de emoción y nerviosismo, pero estar rodeada de mis amigas más cercanas me hacía sentir apoyada y amada.

La mañana siguiente, despertamos juntas y fuimos a disfrutar de un delicioso desayuno. El ambiente estaba lleno de energía y anticipación por lo que el día nos deparaba. Regresamos a la habitación, y ahí estaban, las maquilladoras y peluqueras listas para hacer su magia. Les expliqué que quería mantener un estilo clásico y elegante, algo que reflejara mi personalidad y la importancia de este día tan especial.

Mientras se ocupaban de mi maquillaje y peinado, entró en la habitación Virginie.  Mi corazón latía con fuerza mientras ella sostenía en sus manos el vestido que usaría en mi boda. Un vestido que había sido diseñado especialmente para mí, inspirado en el estilo clásico y atemporal que siempre había admirado.

Cuando finalmente vi el vestido, mi corazón dio un vuelco. El diseño resaltaba mi figura con suaves líneas y elegantes detalles.

El vestido era de un blanco radiante, con un corte ajustado que caía hasta la cadera, y a partir de allí se ensanchaba en una falda fluida. El escote ilusión y los detalles de encaje le daban un toque romántico y refinado. Un velo largo y fino completaba el conjunto, añadiendo un aire de misterio y elegancia a mi aspecto. Al mirarme en el espejo, no pude evitar sentir una mezcla de emociones abrumadoras: felicidad, nerviosismo y, sobre todo, gratitud por todo el amor y la belleza que rodeaban este momento.

Cuando finalmente estuve lista, todas mis damas de honor salieron de la habitación, dejándome a solas con mis pensamientos y emociones. El tiempo parecía detenerse, mientras esperaba el momento de dar un paso que cambiaría mi vida para siempre. Mi corazón latía con fuerza en mi pecho, mezclando la emoción y los nervios de ese instante tan especial.

Después de un rato, vi la puerta abrirse lentamente y allí estaba mi papá, con los ojos vidriosos y una sonrisa llena de amor en su rostro. Su presencia en la habitación era una mezcla de comodidad y calma, y me recordó a todas las veces que me había apoyado en cada paso de mi vida. Cuando me miró vestida de novia, sus ojos se llenaron de lágrimas, pero su sonrisa no se apagó ni por un momento.

Se acercó a mí con paso lento y pausado, como si quisiera saborear cada segundo de ese momento. Al llegar a mi lado, tomó mi mano entre las suyas, y su voz, llena de emoción contenida, rompió el silencio de la habitación.

- Mi princesa, estás preciosa - dijo con un nudo en la garganta, mientras sus ojos se encontraban con los míos - No tengo palabras para describir cuánto orgullo siento al verte aquí, convertida en la mujer fuerte y hermosa en la que te has convertido -  Se acercó a mí y supe que su abrazo significaba mucho más que palabras. Me rodeó con sus brazos, con la misma ternura que solía hacerlo cuando era pequeña. Su abrazo me llenó de calma y seguridad, como si todo fuera a estar bien, como si estuviera protegiéndome de cualquier temor o duda que pudiera tener.

- Gracias, papá. Significa mucho para mí que estés aquí y compartas este momento conmigo -

- No podría estar en otro lugar en el mundo en este momento. Estoy aquí para apoyarte en cada paso de este camino - acaricio mi mejilla con ternura.

Sus palabras resonaron en mi corazón, recordándome que este día no solo se trataba de mi amor por Pierre, sino también de las conexiones y los lazos que compartimos con nuestras familias. Después de un momento, mi padre me tomó del brazo y, con una sonrisa emotiva, caminamos juntos hacia el altar.
————————————————————
Nuevo caaaap!!!!
¿cómo están? Yo respirando el mismo aire contaminado que Taylor Swift 😮‍💨