Soy la hija de la emperatriz |La emperatriz divorciada|

36: Lindo momento

"¡¿Las cosas flotan?!" Pregunte asustada.

"Debe tranquilizarse alteza! Esto es... ¡Increíble!" Dijo sorprendido pero a la vez ¿Alegre?

"¡¿Increíble?! ¡Yo no quiero esto! ¡No lo quiero!"

"¡Ah!" Solté un pequeño grito al ver como las cosas de mi habitación rodeaban al duque flotando.

"¡T-tranquilicese!" Exclamó.

Trate de hacer lo que decía, respiraba hasta estar mejor. Las cosas cayeron al instante, dejando algunos objetos de porcelana destruidos.

Mire a mi alrededor, era todo un desastre.

"Yo... No quiero, esto" Dije casi susurrando.

"No hay manera de eliminar esto de usted... Pero, ¡Usted es importante!"

"¿En que modo?"

"Los jóvenes de su edad no tienen tantos dones como usted, es fabuloso" Dijo.

"¿Fabuloso?"

¿No escucho que no quería estos dones?

"Claro que lo escuché, pero si usted los aprende a controlar, todo sería más fácil para usted" Dijo convencido.

"¿Y quien me enseñará?" Pregunte

"Los magos de aquí no son tan experimentados"

"Por eso, yo la ayudaré, la ayudare a controlar sus poderes. Tal vez hasta sus padres la ayuden" Dijo.

"Pero... Tengo miedo de lastimarlos, en especial, a mi madre... No podría vivir si la lastimó" Dije con mis ojos cristalizados.

Tenía mi misma en el suelo, cuando sentí que me abrazaban. Era el duque Kaufman, sus brazos eran cálidos, era muy alto por lo cual tuvo que agacharse.

"Todo estará bien, no se preocupe" Dijo.

El silencio extrañamente cálido fue interrumpido por la puerta abriéndose.

"¡¿Que rayos paso aquí?!" Preguntó gritando padre.

"¿Ah?" Había olvidado el desastre que había hecho.

"Padre...! Yo-" No pude terminar la frase pues mi padre me tomo del brazo para estar a su lado.

"¿Que le ha hecho a mi hija?" Dijo con un tono amenazador.

Pero no provocó ninguna expresión en el duque, manteniendose sereno.

"Padre yo lo he hecho" Dije.

"¿Tú? ¿Cómo? ¿Por qué?" Preguntó agachándose para estar a mi altura.

Empecé a tartamudear, no podía formular bien las palabras.

¿Que tal si mi padre piensa que soy un monstruo? No podría soportar su mirada de desprecio, aunque podría acostumbrarme...

Apretaba con fuerza mi vestido mientras mi mirada estaba en el suelo.

"Su hija está en la segunda etapa de magia" Dijo el duque.

"¿Cómo?" Dijo sorprendido.

"Y yo le estaré enseñando a manejar sus poderes, su majestad" Finalizó.

Mi padre tenía sus ojos tan abiertos por la sorpresa.

"Eso es... ¡Estupendo! ¡Mi hija una maga! ¿Lo sabe tu madre?" Preguntó emocionado.

"Eh... Aún no se lo he confirmado" Dije rascándome la cabeza con una rusa nerviosa.

"¡Debemos contárselo! Pero... ¡Estoy muy feliz, hija mía!" Dijo mientras me abrazaba.