INDIFERENTE Y ARROGANTE

C: 19 - ¿ASÍ DE FÁCIL?

Ministerio de Magía-

-No habían pasado ni cinco minutos desde que los chicos habían entrado a la oficina de Gaspar, cuando los vi salir sacando todo el aire que traían en sus pulmones y se dieron una mirada cómplice.

Caminaron directo a mi oficina, yo estaba junto a las chicas. Por alguna razón, Ginny ni siquiera trabajaba en el ministerio pero aún así podía entrar y salir cuando quisiera, se me hacia raro, pero era bueno tener a mi mejor amiga aquí.

Una vez los chicos entraron, me miraron con el ceño fruncido y solo así supe lo que había pasado-

Hermione: Les dijo que no, ¿cierto?

Ron / Harry: ¡Nos dijo que no! -dijeron ofendidos-

Ginny: ¿Qué pasó?

Ron: El hombre es muy directo con sus respuestas, eso paso.

Emily: ¿Qué les dijo?

Harry: Nada, a Ron lo calló y a mi me regañó. Ni siquiera sabía que trabajábamos en el ministerio. -dijo ofendido-

Hermione: Si, el piso de los aurores aún no lo ha ido a evaluar. -dije mirando el calendario pegado en la pared de mi derecha-

Ron: Al diablo su evaluación. -dijo enojado- Me dijo que no le importaba nada de lo que dijera.

Ginny: Apuesto a que le hablaste de comida. Sinceramente a nadie le importa.

Ron: Oye, la comida es sagrada. -dijo ofendido-

Ginny: Solo decía.

Harry: Hermione, él no acepto. No sé cómo quieres que seamos sus amigos si se comporta tan indiferente y arrogante.

Hermione: Él no es indiferente y arrogante.

Ron: Oh, créeme. Lo es. Que bueno que no acepto. Mejor para mi, es un idiota.

Emily: Lastima, Ronald. Porque ahora es turno de Hermione vaya a la oficina del ministro y le pida amablemente, y no como dos neandertales, que asista a la noche de juegos.

Ron: ¿Neandertales? -preguntó confundido-

Harry: Después te explico.

-Ronald asintió-

Ginny: Bien, Hermione. Te esperamos.

Hermione: Claro. No tardó.

Harry: Por como es, estoy seguro que no.

-Rodé los ojos por su respuesta, pero aún así salí de mi oficina y caminé en dirección a la oficina de Gaspar donde toqué tres veces y la puerta de su oficina se abrió sola, como se costumbre.

Rápidamente vi al hombre sentado detrás de su escritorio y escribiendo algo en un pergamino, así que solo entre sin hacer ruido-

Gaspar: Ya les dije, inútiles aurores que no iré a su jueguito de... -pero el hombre alzó su vista y me miró con sorpresa- Señorita Granger.

Hermione: ¿Inútiles aurores? -lo miré con una ceja alzada-

Gaspar: Yo...

Hermione: ¿Así trata a sus trabajadores, ministro? -me cruce de brazos-

Gaspar: No, claro que no.

Hermione: Me pareció lo contrario al escuchar su ofensa.

Gaspar: ¿Qué hace aquí, señorita Granger?

Hermione: Ya que "los inútiles" aurores de mis amigos, no pudieron convencerlo de ir a la noche de juegos, venía a hacerlo yo. Pero esta claro que...

Gaspar: Acepto ir a la noche de juegos.