𝗔𝗟𝗪𝗔𝗬𝗦 𝗙𝗢𝗥 𝗬𝗢𝗨 ; 𝗔𝗹𝗱𝗼 𝗚𝗲𝗼.

𝟭𝟬. 𝖢𝖺𝖽𝖺 𝗏𝖾𝗓

Cada vez que Aldo regresaba a Monterrey para cualquier cosa, aunque mayormente para visitar a Luna, siempre quedaban para diferentes planes en pareja. Algunas más cursis que otras, pero, ¿Quién se negaría a pasarlos?

— ¡HOLAA! —saludo Luna con un abrazo al momento de tener a Aldo delate de ella.

— Hola Ney —menciono aquel apodo que le había puesto, al mes de empezar a salir, aceptando el abrazo comenzó a sonreír.

"— No te quiero poner un apodo que la mayoría de personas usen en sus parejas —hablo Aldo mientras la veia del otro lado de la pantalla.

— No le veo nada de malo a ese tipo de apodo —menciono Luna sin importancia.

— Si, pero tu ya me pusiste "Van" y yo no quiero quedarme así sin ponerte nada —recordó aquel apodo puesto referente a su segundo nombre "GeoVANi" que, inicialmente, iba a ser "Vani" pero a Aldo no le convenció del todo.

— Bueno, a ver, ponme uno — se inclino en su silla para sentarse mejor.

— A ver... —quedo callado por un largo tiempo hasta que su mente hizo un "click" y contestó— Ney —musito llamando su atención.

— ¿Qué? —pregunto Luna al no escúchalo bien.

— Ney, por "LuNEY" —hizo énfasis en el "Ney"— ¿No te gusta? —esas pequeñas situaciones en las que Aldo parecía un niño pequeño.

— No, no, o sea, si me gusta nada más no te escuché la primera vez —"

Desde ese día había salido ese apodo.

— ¿Cómo estás? —pregunto una vez se separó del abrazo.

— Bien, bueno, algo cansado, pero bien por volverte a ver —sonrió una vez más.

Algo que podía confirmaste era la pena que seguían manteniendo, a pesar de tener casi 3 meses saliendo, seguían con el mismo nerviosismo que del inicio al tomarse de las manos o haciendo cualquier otra cosa juntos.

Levantó su mano para que Luna la viera— ¿Mano? —pregunto como niño pequeño.

No pudo evitar formar una sonrisa ladina al escuchar la pregunta — Sabes que no me tienes que pedir permiso para tomarme de la mano, ¿Verdad? —

— Si, pero no hay pedo —volvio a su estancia habitual.

Al salir observaron el auto de Osvaldo estacionado casi al frente del aeropuerto.

— Hola mojón —saludo ahora Osvaldo dentro del auto.

— Hola —saludo de regreso.

— Uy, por algo son novios, saludan igual de seco —se quejo al escuchar la respuesta.

— Perdón valdo, es que tengo sueño y no doy más —respondió una vez estuvo dentro del auto.

El camino fue algo corto, para Aldo que se había quedado dormido en medio viaje, pero igual fue divertido.

— ¿Te vas a quedar con Luna? —volvio a preguntar una vez estuvieron delante del departamento de Luna y despertar a Aldo.