𝗔𝗟𝗪𝗔𝗬𝗦 𝗙𝗢𝗥 𝗬𝗢𝗨 ; 𝗔𝗹𝗱𝗼 𝗚𝗲𝗼.

𝟬𝟯. 𝖢𝗈𝗇 𝗆𝗂 𝗁𝖾𝗋𝗆𝖺𝗇𝖺 𝗇𝗈./𝖠𝗇̃𝗈 𝗇𝗎𝖾𝗏𝗈

28/12/2020

Y ahí se encontraban nuevamente Aldo y Osvaldo peleando por lo que el chat decía "PELEA LUNEY", nombre raro, pero no había tiempo de cambiarlo.

— ¿Qué crees?, ¿Qué no me doy cuenta de cómo la miras y le hablas? —volvió a decir Osvaldo mientras "atacaba" a Aldo— ¿Y también crees que no sé que le enviaste un regalo por navidad? —reclamo.

— Deja de mamar Osvaldo —contestó mientras se defendía de los golpes dados en el juego— Y si le mandé un regalo fue por qué es mi mejor amiga, deja de decir pendejadas. —

— Ya tío deja que mis papás sean felices, por favor —hablo roier mientras fingía llorar.

— Tu no te metas Rogelio —contra atacó Osvaldo mientras lo golpeaba ahora a él en el juego— Y de una vez te digo enfrente de toda persona que está aquí —paro de hablar mientras cambiaba de escena— Y también enfrente de Beto —volvió a hablar volteando a ver a su hermano que le repondio con un "si" que se escuchó en el stream— Con mi hermana no te metas porque yo si te voy metiendo un putazo —¿Celos de hermano?

— Aja, ¿Y luego? —pregunto Aldo haciendo reír a roier.

Y así había pasado el directo insultos, bromas y una que otra pelea referente a lo anterior aunque el chat lo tomaba a medida de juego aunque tan juego no era.

— Pregunta, ¿Lo dices en serio? —hablo Aldo después de que los tres anteriores apagaran directo.

— ¿Qué? — contestó Osvaldo sin recordad lo hablado anteriormente.

— Lo de tu hermana —

—Si, y más te vale no pasarte con ella —contestó serio.

— ¿Por? —volvió a preguntar.

— Por un pendejo que no la valoro lo suficiente y no quiero volverla a ver otra vez de esa manera —contestó con la mirada perdida aparentando recordando aquellos días.

Aldo no hablo más, no quería que su amigo entrara en ese estado de transe en el que se solía meter y no salir hasta que alguien lo obligará a hacerlo.

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Año nuevo. Sueños nuevos. Metas nuevas. Aldo decidió despertarse un poco más temprano para ayudar a su madre a terminar algunos platillos para la cena de esa misma noche.

— Hola —saludo una vez entro a la cocina.

— ¿Cómo amaneciste? —repondio su madre despues de darle una sonrisa.

— Bien, aunque me duele un poco la espalda, pero nada de que preocuparse —repondio acercándose a él refrigerador para seguido abrirlo.

— Oh bueno —repondio volteando a verlo.

— ¿Y en qué quiere que le ayude? —pregunto una vez cerro el refrigerador.

— En casi nada ya casi termino no te preocupes —le repondio volteando para hacer lo que inicialmente era su atención— Por cierto, te llegó un paquete está halla en la sala —repondio sin voltear a verlo.