~15~

756 68 7
                                    

-Verte a los ojos y pensar: Aqui me quiero quedar para siempre-

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


-Verte a los ojos y pensar: Aqui me quiero quedar para siempre-

Itadori visualiza a Mahito e intenta entender quién es.

Cree que es un simple humano...

Pero sus instintos le gritan otra cosa. 

-¿Quién eres?-Dijo sin aparta la visa de el.

-Un gusto conocerte recipiente de Sukuna-Y procede a transformar parte de su cuerpo, el brazo . Para después estirarlo hacia la chica proporcionando un fuerte, logrando que se estrelle contra una gran

-¡Corre Junpei!

Itadori se siente completamente estúpida, al no haberse dado cuenta de que se trata de la maldición del cual Nanami le advirtió...

Entre gritos, Itadori le suplica a Junpei escapar lejos, sin importar que tipo de relación tenga con el recién llegado, para evitar que sufra algún tipo de daño. Junpei le asegura que no debe preocuparse ya que Mahito es una 'buena' persona. Sin embargo, detiene en seco sus palabras cuando recuerda los experimentos que la maldición suele realizar con los humanos

-¡Qué no te toque!-Y Junpei como si fuera automático rápidamente se aleja de Mahito.

-¿Fuiste tú quién dejó el dedo en mi casa?-Mahito no dice nada.

Pero no hacía falta una respues...

-¡Junpei vete de aquí!

-Eres....un...fingiste ser mi amigo...y..

-No, yo nunca fingí nada-Le corto rápidamente la maldición

-¡Me engañaste, me usaste! ¡Eres!

-¡Yoshino vete de aquí!-Grita la chica

Junpei se lo piensa

No quiere dejarla aquí sola

No a la persona que ha demostrado que verdaderamente es su amiga

Qué lo a hecho reír

Qué le ha sonreído

Qué lo ha ayudado

Qué le ha dado una alternativa para ser feliz y no dejarse arrastrar por la oscuridad. Así que no hace como en esas tontas películas de terror que ve, sino que simplemente obedece y sale corriendo escaleras abajo...

-Tu no escaparas-Dice la maldicion mientras lo sigue con la mirada.

La distracción es suficiente para que la chica se consiguiera liberar. Hierbe en ira y procede a atacar con una gran velocidad a la maldición.

Lo odia...

No lo conoce

Tampoco le hace falta

Y ya lo odia

La novia de Megumi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora