Donde todo comenzó (Jinx)

Capítulo 6

Año 2014... Segunda línea temporal

Tuvo que bajarse del autobús debido a que se estaba sintiendo bastante mal, un calor emanaba desde su interior hacia su piel, estaba mareado y con dolor de cabeza percibiendo el olor de sus propias feromonas esparciéndose por ahí.

¡No! ¿Qué fue lo que salió mal? Estaba seguro de haber tomado los inhibidores tal y como el médico se lo había sugerido ¿Por qué estaba entrando en celo en el peor momento?

Justo cuando las calles estaban llenas de gente y cualquier alfa podía verse afectado por él.

Sintiéndose desprotegido pensó en llamar a su abuela para que fuera por él, pero seguro ella estaba ocupada trabajando en el restaurante que atendía.

De todas formas, se ocultó en una calle donde había un enorme bote de basura que seguro podría ser de ayuda para cubrir su olor. Sus manos temblaron cuando intentó hacer la llamada y lo siguiente fue su rostro estampándose contra el suelo mientras un hombre le halaba el cabello y ejercía fuerza para retenerlo en aquella postura.

—¡Es aquí! Te lo dije. Aquí está el idiota que libera feromonas— el sujeto que lo inmovilizaba llamó a otro sujeto aún más asqueroso y fue el segundo tipo quien no tardó en liberar feromonas para someterlo. No se sentía dueño de su propio cuerpo, estaba paralizado, temblaba y le dolía el reciente golpe en la cara.

—Chupa. Abre bien la boca ¿Oíste? — el que había llegado después, le obligó a ponerse de rodillas.

Humillado, asqueado y terriblemente asustado fue sometido por el hombre que le orillaba a usar su boca para complacerlo. Con la poca fuerza que le quedaba luchó para apartarse e intento correr, pero el hombre que lo había encontrado lo tomó por una pierna haciéndole caer y lo arrastró por el suelo hasta tenerlo de vuelta en la posición inicial. Le propinó un par de puñetazos en el rostro, esto le hizo divagar entre la conciencia y la inconciencia, abría y cerraba los ojos de vez en cuando.

Entre los dos, le arrancaron los pantalones y peleaban entre si poniéndose de acuerdo para ver quien iría primero.

—¿Crees que este omega sea virgen?

—Tiene un cuerpo lindo, no parece que alguien le haya puesto las manos encima.

Se carcajearon juntos. Mientras uno le colocó el pene en la cara masturbándose cerca de sus ojos, el otro le abrió las piernas y le provocó el dolor más horrible cuando se adentró en él con violentas embestidas que lo hicieron vomitar y luego desmayarse.

Era lo más horrible que podía haberle pasado.

¡¿Por qué?! ¿Por qué a él?

La próxima vez que abrió los ojos escuchaba los gritos desesperados de alguien que lo sostenía en brazos.

—Por favor. Alguien ayúdelo, está muy mal— no reconocía esa voz, no entendía lo que había pasado después de todo lo demás.

Sintió cuando lo ponían sobre una camilla y no supo más de si hasta que abrió los ojos días más tarde en la cama de un hospital.

Parpadeó varias veces examinando el entorno, había un chico dormitando en el sofá junto a la cama y no entendió bien quien era él.

—Kim Dan. Estás despierto— el muchacho se acercó para sostener su mano, él estaba tan débil que no pudo apartarla como le hubiese gustado.

—¿Quién eres?

—Choi Heesung, te conozco de la universidad.

—Perdona, no te recuerdo.

—Tranquilo, no intentes pensar mucho. Iré a avisar que estás despierto. No tardo.