Esmeralda (BORRADOR)

XXVI

Axel a la ver que su padre llegó molesto se fue a dormir, yo al contrario necesitaba hablar, algo me hacía estar justo ahora tocando la puerta de edu despacho.

—Adelante— dijo fríamente, la oficina estaba fría, me miraba con molestia y fastidio—

Estaba solo, una copa de whiskey descansaba en su escritorio justo al lado de él.

Me dije nada, su miraba me seguía estructurando con fastidio, me senté en la silla que estaba frente a su escritorio.

—¿Que quieres? No tengo nada de tiempo para estar soportandote—se oía molesto—

—No me hables de esa manera, quería saber cómo iba todo...

—Mal, el tratado de paz se fue a la mierda— dice el con fastidio—

—Lo siento... ¿Mi madre?— pregunto—

—Donde están todos mis juguetes para divertirme— dice el como si no tuviera importancia, su mirada estaba directamente en mis ojos como un gran peso—

—No le hagas daño— digo viendo mis manos— Dejala ir, con la amenaza de que no se me acerque y listo— digo en un susurro bajando la mirada para ver mis dedos—

—Olvida eso de lo hacerle daño, atento contra la vida de mi hijo y eso es más que suficiente para que se gana un castigo como lo es una muerte lenta y dolorosa impartida por mí— dice con seriedad—

Era increíble lo que la ambición... O lo que sea que la motivo a hacer eso puede hacer, nunca me espere de ella, me sentía tan frágil, ¿Nunca me amó? ¿No signifique nada para ella?.

—¿P-p-p-puedo d-darte u-un a-abrazo?— digo tartamudeando tímidamente—

Necesitaba uno de sus abrazos, nunca lo había dicho, pero... Sabía que me quería, necesitaba sentir que alguien aunque fuera de mentira me quería, simplemente necesitaba saber que alguien estaba allí para mí.

—¿Es enserio?— dice este sonriendo con sorna— Dejaste las cosas muy claras esta mañana y ahora quieres que te permita abrazarme haciendo como si esta mañana no hiciste nada? Estás mal—

—D, enserio necesito poder abrazarte o que me abraces— digo tratando de hablar, mi voz estaba quebrada y solo fue un susurro inaudible—

—Блин, почему я такой хрупкий?— dice en ruso—

No dice nada y lentamente me voy acercando hasta él hasta que lo abrazo, estaba llorando como niña pequeña sobre su pecho, era demasiadas cosas sobre mis hombros siempre lo han sido y siento que todas se me están acumulando haciendo que empiece a no poder más, siento que ya es demasiado peso.

—Damon está viva— digo en un susurro—

—¿Quien?— aún me trataba fríamente, me dejó estar encima de él mientras lo abrazaba y lloraba pero no me correspondía—

¿Y si te equivocaste en la mañana con la decisión que tomaste de alejarlo?

—Mi hermana, fue un día muy revelador, mi madre... Me dijo muchas cosas que...

—No hables de ello si no quieres— dijo él—

—Quiero desahogarme ese es el punto, siento que llevo demasiado peso sobre mis hombros— digo acariciando su cabello—

—Vale, te prometo que la mataré— dice el sonriendo— Nunca debió mostrarte a esa conocida y prácticamente abusar de tu bondad para hacerte trabajar de...

—Puta— termino su oración—

—No, no quise decir eso, pero ... No encuentro una palabra para decirle a una persona que hacía mamadas— dice este—