VI

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Dure al rededor de una hora así llorando abrazada a el, hasta que sonó su teléfono y el nombre de Andara asomaba, apagó el teléfono y se sentó en el sofá conmigo en su regazo, así duramos unas horas más hasta que deje de llorar por completo.

-tenemos que hablar-digo haciendo un moño desarreglado en mi cabeza-

-yo no tengo nada que decir -dice fríamente dando caricias leves en mi pierna-

-cada día me sorprenden más Damon Ivanov-digo melancólica-

Me intento parar de su regazo y no me suelta, hasta que me acomoda de frente y lo veo directo a los ojos, todavía veo cierta molestia en su mirada.

-¿qué quieres hablar?-me dice mirándome fijamente como si pudiera leer todo en mí-

-quiero contarte cómo pasó todo-digo-

-te escucho- dice de nuevo con esa voz que me hiela hasta la sangre -

-Ese día el día que te fui a buscar a la casa de tus padres, estabas con Daniela sobre tus piernas estabas follándotela- digo sonriendo melancólicamente- Justo un día antes que te fueras ¿Te acuerdas? ¿Recuerdas mientras te la follabas?- digo rencorosamente, él enarca una ceja- A estas alturas no importa, ella me vio se burló de mí, salí corriendo, al estar en la sala tu madre- digo con una tilde de desprecio- me dijo que te ibas a casar, que me alejara de ti o mi familia iba a pagar las consecuencias- digo tratando de no sonar dolida-me fui a mi casa, ese día me robaron y golpearon hasta que se cansaron, asumo que eran los gorilas que tenía tu madre de guardaespaldas, porque usaron la misma camioneta en donde ella se trasladaba a distintos lugares, me dejaron sin ropa en medio de todos los viejos depravados que viven allí en el barrio de mala muerte donde vivía, me manosearon Damon- digo tristemente-

- Pero si igual te acuestas con uno- dice el tranquilamente refiriéndose a los viejos-

-Nunca... Nada- lo miro con furia ¿Cómo se atreve?- al llegar a casa a mamá le dio una crisis, el haberme visto en ese estado le causó una gran impresión que le generó un infarto, vuelta mierda como estaba me tuve que vestir e ir al hospital, tres días creo que fueron los que mi madre estuvo internada en ese sitio, estuve día y noche con ella sin un descanso, mi hermana trabajaba sin parar para poder costear todas las medicinas, no dormí en esos tres días, una doctora se apiadó de mí al segundo día y me curó los golpes, salió mi madre del hospital quise de ilusa ir a verte y desahogarme a pesar de todo eras mi único amigo, cuando fui ya te habías ido, no estuve bien, entre en depresión... Te amaba y me había aferrado a ti de una manera insana- digo con los ojos cristalizados bajando la mirada él la devuelve a sus ojos- al mes me enteré de que estaba embarazada, el 20 de julio, tenía tres meses de embarazo, ese día llore como nunca antes lo había hecho, yo con a penas 20 años y embarazada, no sabía que iba a hacer, tenía tantos planes que no podría cumplir, me cerré no pensé más allá, buscar soluciones o diferentes métodos a los que tomé ese día, tenía que adaptar mis planes de vida incluir a mis pequeños, no sacarlos de mis planes como los hice- digo rompiendo en llanto lo abrazo, pero no recibo nada de su parte- mi hermana- susurro recostada en su hombro - el yo mentirle a ella era imposible, y más algo tan grande como lo de un embarazo, le conté todo, gasto todos sus ahorros más un préstamo al banco para un boleto de ida y de vuelta hacia Francia, y cuál fue mi sorpresa al llegar... Estabas con otra, de nuevo- digo escondiendo mi cara en su cuello, me toma fuertemente para que lo vea a los ojos- recuerdo claramente la estabas besando apasionadamente justo en frente de la torre Eiffel, me fui, tomé el boleto de regreso, no tuve el valor de acercarme y decirte todo- digo mirando sus inexpresivos ojos

-¿Quién te había dicho donde estaba?- pregunta furioso-

-fue... Fue tu madre- digo tratando de que me crea-

Esmeralda (BORRADOR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora