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Cuando llegaron a la casa de Jimin ambos se bajaron y el omega invitó a pasar al alfa, cuando entraron se quitaron los sacos y los colgaron para dirigirse al sofá para sentarse y pensar en algunas cosas. Yoongi tenía abrazado al omega mientras hablaban de la boda, Yoongi quería que fuera como el omega quisiera.

—Lo mejor sería una boda privada. —hablo Jimin. —no tengo a personas que invitar y no creo que tú quieras que tu familia esté presenté.

—Será como tú quieras. —le beso la mano. —si prefieres que solo seamos nosotros dos, para mí está bien.

—¿Estás seguro? —preguntó Jimin.

—Claro que sí bonito. —sonrió. —la boda debe de ser como tú quieras, será tu momento.

—Nuestro momento. —hablo Jimin.

—Nuestro. —dijo. —¿A dónde te gustaría ir por la luna de miel?

—No lo sé. —se puso a reflexionar.

—Donde tú elijas, yo te llevaré. —lo sentó sobre él. —si quieres darle la vuelta al mundo yo te llevaré.

—Me gustaría visitar tu templo. —hablo Jimin. —tal vez ir a Italia o a Roma.

—Entonces esos serán los destinos de nuestra luna de miel. —le dio un corto beso en los labios.

—Tengo miedo. —habló Jimin mientras jugaba con el cabello del dios.

—¿De qué? —le preguntó. —¿A qué le temes?

—Temo que no pueda llegar al día de la boda y muera antes. —lo miro a los ojos. —y que ya no pueda volver.

—No tengas miedo. —susurró. —verás que llegaremos a nuestra boda y seremos felices juntos.

Jimin sonrió y asintió para ocultarse en el cuello del alfa para poder aspirar el aroma de este, Yoongi por su parte lo abrazó con fuerza mientras cerraba los ojos y de igual manera guardaba en su memoria el dulce aroma de su pareja. Luego de un rato ambos se dirigieron a la cama del omega y se acostaron en esta para dormir en ella, Jimin descansaba plácidamente en el pecho del dios.

—¿Estás despierto? —preguntó Yoongi.

—Sí. —respondió luego de un rato. —¿No puedes dormir?

—No. —contestó. —¿Y tú?

—Se me hace difícil. —se alejó. —siento que si duermo no voy a despertar.

—No pienses en ello. —le acarició el brazo. —ya te lo dije.

—Me es inevitable. —lo vio.

—Entonces haré que lo olvides. —lo recostó en la cama. —al menos solo por hoy.

Jimin sonrió al ver al pálido el cual se acomodaba sobre él para besarlo de manera lenta, el omega cerró los ojos y atrajo más a él al pálido para poder sentirlo una vez más.

Sol de media noche [Y.M][✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora