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Los días pasaban de manera lenta y Jimin trataba de ser fuerte para el día de la boda, tenía uno que otro sangrando de nariz, pero gracias a los tés que la diosa Perséfone le daba podía soportar un poco más. Él estaba emocionado, ya que solo faltaba un día para su boda por lo cual ambos ya se encontraban en el lugar donde se casarían, solo que estaban en habitaciones separadas, el omega miraba su traje el cual era casi idéntico al que ocupaba cuando conoció a Hades hace mucho tiempo.

Al amanecer Jimin estaba viendo su maquillaje, ya que quería que fuera sutil, pero hermoso además de que su matrimonio sería en la puesta de sol. Jimin miró su celular al ver que era una llamada del alfa por lo cual con una sonrisa le contestó notando que era una videollamada.

—Hola, cariño. —dijo Yoongi al ver al omega por la pantalla.

—Hola, alfa. —hablo. —¿Por qué me hablas tan temprano? —pregunto curioso.

—Solo quería saludar a mi hermoso futuro esposo. —respondió. —y saber si estás bien.

—Pues hola. —dijo con burla el omega. —yo estoy bien, de hecho iba a salir para ir al spa del hotel. —contó. —¿Tu estás bien?

—Así que mi lindo prometido se va a poner mucho más hermoso de lo que ya es. —hablo Yoongi. —yo también estoy bien, iba a ir a ver los últimos detalles para tu noche.

—Nuestra. —corrige el omega. —recuerda que no soy el único que se va a casar.

—Lo sé. —rio el pálido. —pero digo que es tu noche, porque sé que lucirás hermoso y porque brillarás más que la luna, las estrellas y la galaxia misma.

—Basta. —se cubrió las mejillas el omega. —haces que me avergüence.

El alfa rio haciendo gestos tiernos provocando que el omega se riera un poco más mientras se cubría las mejillas avergonzado, luego de una larga charla y de despedirse; Jimin tomó sus cosas para ir al spa para relajarse un rato y luego arreglar su cabello rosa. Yoongi por su parte miraba el lugar llegó de flores de todos los colores además de ver cómo preparaban el lugar, aunque no quería invitar a nadie de su familia no pudo evitar invitar a su hijo el cual sería el único testigo de su amor.

—Papá. —escucho una voz el pálido.

—Nadie te creerá si me llamas así. —se giró y vio al chico.

—¿Cómo debería de llamarte entonces? —le pregunto.

—Solo dime Yoongi. —lo vio. —¿Tuviste un buen viaje?

—Claro. —asintió. —todo estuvo tranquilo. —miro el lugar. —¿Y Jimin?

—Él está en el spa. —contestó. —quiere relajarse antes de la boda.

Sol de media noche [Y.M][✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora