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Sonrió — ya lo hizo contigo— aprovecho que el auto está parado en el semáforo y coloco mis manos en sus mejillas e inclino mi cara para besarlo, nos separamos cuando escuchamos al auto de atrás sonar su bocina. Killian siguió conduciendo hasta llegar a la escuela, se estaciono y baje del auto con una gran sonrisa, estaba flotando y todo me parece perfecto.

Al entrar a la escuela mientras camino por los pasillos Damián se acerca y coloca su mano alrededor de mi cuello le doy una mala mirada

— ¿Que ocurre Ezra, porque me ves así? —pregunta cínicamente

Frunzo el ceño — no puedes estar hablando en serio — dijo molesta

El me sonreí como si nada — vamos Ezra, sé que hemos tenido diferencias por idiota de Killian, pero aun somos amigos

Quito su brazo de mi — no es un idiota, es mi novio y es lo mejor que me ha pasado

Damián hace una mueca — ¿y eso donde me deja a mí?

— No lo sé— dije cortantemente

— Oye yo solo quería lo mejor para ti, pero si tú te conformas con poco es tu problema

Cruzó los brazos molesta — lo dijiste bien es mi problema así que no te metas, voy a clases. — dije molesta

Damián me tomó del brazo— espera

—Suéltame. — exijo molesta

El niega — vas a terminar con nuestra amistad por alguien como Killian

— Yo no la termine fuiste tu

Él sujeta mi brazo con más fuerza — Yo vine a hablarte para hacer las paces, porque tú me importas demasiado, te quiero Ezra y te extraño, pero tú te pones a la defensiva y haces que me altere — dijo con la voz quebrada

Siento un nudo en la garganta — lo siento y también te extraño

Él suelta mi brazo — estupendo hoy va a ver una fiesta en casa de Rebeca deberías de venir

Niego con la cabeza — no es buena idea, y debo ir a trabajar

El hace un puchero — oye por favor necesito que las cosas sean como antes y además la escuela se va a terminar pronto, debemos recuperar el tiempo por favor, dime que tengo que hacer para me vayas

— Esta bien, lo voy a pensar

Damián me sonreí — gracias, va a ser increíble esta noche como los viejos tiempos, solo no lleves a Killian

— Esta bien

Damián me da un beso en la mejilla — gracias te extrañe mucho

— Yo también— caminé hacia mi clase de música avanzando al entrar al salón mi profesora que me recibe con una gran sonrisa

— Gusto a la persona que espero

Le doy una mirada de confusión — ¿por qué?

— La escuela hará una presentación y quiero que tú toques

Mis ojos se iluminan y siento como mi respiración se acelera — yo — dije nerviosa

— Si, eres muy talentosa y vendrá un representante de la universidad de julliard será una gran oportunidad para ti

— Gracias, no la voy a decepcionar

Ella sonreí — bien entonces vamos a practicar

Tome el violín y mis notas musicales y comencé a tocar durante mi sesión que duró una hora al finalizar la clase la profesora me dio algunas observaciones, salí del salón de clases muy emocionada no podía creer lo que está pasando y solo quería compartir la noticia con Killian, así que salí directo de la escuela y me dirigí al lugar donde da clases de defensa personal.

La equivocación más perfectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora