Mamá Conchy, junto a la diosa Papalachuya, contempló la situación con profunda preocupación. La traición de Samus y la corrupción de la flor Alex habían desencadenado un sufrimiento inmenso en el mundo. José y Mau, así como Renata y Mariano, habían sufrido mucho debido a las acciones de Samus.
En un momento de reflexión, Mamá Conchy se dio cuenta de que la única manera de poner fin a este ciclo de sufrimiento y proteger a todos los seres involucrados era reiniciar el mundo, evitando que José y Mau se conocieran.
La diosa Papalachuya miró a Mamá Conchy con tristeza en sus ojos. "Comprendo la dificultad de tu decisión, Mamá Conchy, pero ¿estás segura de que es la única solución?"
Mamá Conchy asintió con pesar. "Sí, querida amiga. A veces, para evitar más sufrimiento, debemos tomar decisiones difíciles. Reiniciar el mundo significa darles una nueva oportunidad a todos los involucrados, donde podrán vivir vidas libres de esta tragedia."
Con un gesto de su mano, Mamá Conchy comenzó a canalizar su poder divino para iniciar el proceso de reinicio del mundo. La realidad misma comenzó a desvanecerse y transformarse, borrando los eventos que habían llevado al sufrimiento de José, Mau, Renata y Mariano.
La diosa Papalachuya observó con melancolía cómo todo lo que conocía desaparecía lentamente. Sabía que esta era la única manera de proteger a sus protegidos de un destino oscuro.
Cuando el proceso de reinicio se completó, el mundo se transformó en una nueva realidad, donde José y Mau nunca se cruzaron, y los eventos que habían llevado al sufrimiento fueron olvidados.
Mamá Conchy y la diosa Papalachuya sabían que esta decisión traía consigo un alto costo, pero también esperaban que, en este nuevo mundo, sus protegidos pudieran encontrar la felicidad y la paz que tanto merecían.
ESTÁS LEYENDO
El árbol de manzana y jacaranda
Randomuna historia echa con chat gpt basada en el romance falso de dos estudiantes de preparatoria #prepadosuady