Hacía diez minutos que Irene se había ido de mi casa, minutos en los que estuve pensando en todo lo que me había dicho hasta que el teléfono fijo de casa rompió el silenció del lugar y me levanté para contestar.
-¿Hola?-susurré al descolgar.
- Nini...- su voz hizo que mi corazón saltara ferozmente.
Sonreí con los labios apretados. «obedecería a mi hermana» le confesaría los sentimientos que tenía atorado en el pecho desde hacía mucho tiempo.
-Tengo que hablar contigo.-solté en un tono un poco inseguro.
-Si, nena, yo también, estaré allí en unos minutos.- aseguró antes de colgar.
Solté el aire que mis pulmones habían retenido y acto seguido tomé a Lily del corral dónde aún estaba y la llevé conmigo escalera arriba.
Ya en mi habitación la dejé sobre la cama y me recoste con ella, intentando aplacar los nervios de lo que sucedería cuando Lisa llegará.
.......
El timbre de la puerta principal sonó y me levanté sobresaltada de la cama, mirando a Lily que me miraba con curiosidad debido a mi reciente acto.
-Todo está bien, amor- susurré más para mi misma que para ella. La tomé en mis brazos y fuí directo a la puerta principal.
-Buenos días, Nini- dijo un poco nerviosa cuando ya había abierto la puerta.
Lily empezó a hacer ruidos y estirar los brazos hacía ella para que la tomará y Lisa lo hizo dejando un beso en su cabello para luego hacerse paso al interior de la casa.
-Bueno días. - respondí cerrando la puerta y mirándola de nuevo, ella tenía la mirada en las bolsas que aún yacían en el living de la casa.
-¿Por que no has arreglado eso?- preguntó.
-No he tenido tiempo, mañana se incorporan las mujeres de servicio; ellas lo harán - dije simple y ella asintió.
-Quiero hablarte, Nini- murmuró y yo asentí temerosa de sus palabras, Ella dejó a Lily en el mismo corral del que hacía unos minutos yo la había sacado y se sentó en el sofá frente a él, palmeando el lugar a su lado para que yo tomará asiento, y así lo hice.
-Quiero...- empezo a hablar- Jennie, no te pediré disculpas por lo de ayer, porque la verdad yo quería hacerlo y entiendo sí a ti te molestó, pero no me disculparé.- dijo tan rápido que casi no la entendí.
No obstante; lo hice y me estaba diciendo que quería besarme, eso sin dudas hizo que me animara un poco más para decirle que la qué quería.
-Yo... ¡Dios! ¿Por qué es tan difícil?-murmuró para sí misma. Se estaba irritando, era claro por la tonalidad roja que había en sus mejillas.-Te quiero Jennie.
Me quede estática, mirándola fijo, buscando algún tipo de burla o mentira en su mirada, pero nada, en sus ojos, en su cara, lo único que había era nervios y ¿Miedo?
-Y entiendo Jen -- volvió a hablar justo cuando yo estaba por hacerlo.-Créeme que entiendo si tu no sientes por mí ni el uno por ciento de lo que yo siento por ti. Te hice daño; te separé de tu familia dándote un espectativa falsa de lo que sería tu vida aquí. Te trate mal, en ocasiones hasta te humille, las abandoné. Pero créeme, nena; estoy arrepentida de todo lo que te hice de todo el daño que te causé
Para esté punto yo ya luchaba para seguir teniendo las lágrimas que se me acumularon en los ojos.
-Sé que soy una maldita cobarde por no dar la cara ante tu familia desdé el primer momento en que supe de la existencia de nuestra hija. Una maldita hija de puta por no renunciar ni siquiera a la mínima parte de lo que tu renunciaste por Lily, una maldita... Mil veces maldita por creer en algún momento que Lily era un error en mi vida- ella tenía lágrimas sin derramar en sus ojos - Me retractó de mis palabras y maldigo el día en que las dije. Me maldigo a mí misma por haber pensado eso, pero aunque lo haga sé que esas palabras no se borraran de tu mente, por eso escucha bien Jennie.
Me toma la cara entre sus dos manos para hacer que mis ojos no tengan escapatoria ante los suyos.
-Quiero que estó también se grabe en tu cabeza porqué Lily es el error más hermoso que ha llegado a mi vida. El error que más amo en todo el puto mundo, el que volvería a cometer sin pensarlo dos veces, Jennie... Ella-me suelta y sus ojos enseguida se van hacia su hija.-Ella es mi Hermoso error.
Y con eso mis inseguridades disminuyeron, con eso todo lo que sentía por ella había crecido de una manera increíble, fue por eso que hice lo que hice; la besé, la besé con todo el amor que había estado reteniendo hacía ella. Se sorprendió ante mi acto pero en segundos ya estaba tomando mi cara entre sus grandes manos y profundizando el besó.
-También te quiero Lisa.-susurre separandome un poco.- te quiero y te perdonó.-cerré los ojos con fuerza y ella pego su frente a la mía logrando que nuestras narices se rozaran.
-Gracias, mi Nini -con la voz cargada-, gracias, gracias, gracias.-siguió murmurando, pasando sus pulgares por mis mejillas mojadas.-Te prometo... Te juro por Dios que haré todo lo posible por no volver a lastimarte nena, ni a tí, ni a Lily. Haré todo lo que sea necesario para ser merecedora de ustedes, lo juro.-estableció con lo ojos apretados y yo sólo asentí.
-Por favor no lo hagas, porqué no te perdonaré.
-Lo prometo- dijo y Lily empezó a llorar reclamando los brazos de su madre.
Me limpié la cara y luego miré a Lily que ya estaba siendo levantada por Lisa, los miré a ambas. Talvez si existía una pequeña esperanza para que mi hija tuviera una familia compuesta, esa familia que todo niño merece.
Sonreí no había una manera de explicar la felicidad que sentía en ese momento, visualizando a mi hija, con su madre, la cual era la mujer que yo quería, riendo jugando, a mi lado, Como una verdadera familia.
«Familia» de pronto recordé lo que Irene me había dicho.
-Lisa - pronuncié su nombre atrayendo su atención a mí - ¿Reconocerás a Lily ante todos como tu hija?- pregunté temerosa de su respuesta.
-Por supuesto Jennie, ella es mi hija, todo el mundo debe saberlo.-asintió mirándola.
-¿Hasta mis padres?- volví a cuestionar.
-Ellos principalmente- volvió a mis ojos, y yo sentí un peso menos sobre mis hombros -A ellos le debo una disculpa muy grande, y estoy dispuesta a enfrentar cualquier consecuencia-aseguró- ¿Cuando puedo contactarlos?
-El fin de semana estarán aquí- Murmuré pensativa.
-El fin de semana confesaré todo y no quiero que tú digas nada, dejame a mí hablar con ellos ¿Bien?- asentí.
........
Estaba en mi habitación mirando algunos diseños que tenía que presentar mañana en la empresa, mientras Lisa cuidaba a Lily en su habitación.
-Ya la he dormido - dijo ella entrando en la habitación haciendo que llevara mi vista de los papeles entre mis manos a ella.
-Gracias- Sonreí y se acerco hasta llegar a mi lugar y posicionarse a mi lado.
-No tienes nada que agradecer Jen, Lily también es mi hija-recalcó y asentí devolviendo la mirada a los papeles - Por cierto; mi padre ha pedido verlas de nuevo, está noche.-asentí dedicándole una fugaz mirada.
-Esta bien...-volví a los diseños.
-Jennie-ladee el rostro para asegurarle que tenía mi atención a pesar de que mis ojos estaban en otro lado - ¿Nosotras...?- la miré- quiero decir; ¿Qué pasará con nosotras? ¿Habrá un nosotras al final de la historia?-preguntó haciendo un puchero - y le sonreí con ternura.
-Paso a paso, Lisa, no apresuremos las cosas, sólo deja que fluyan ¿Si?- asintió -Por los momentos estas aprueba, no quiero tener que llorar por tí una vez más.-bajo la cara y asintió con un gesto de culpa y tristeza.
Y me hubiese gustado ser menos directa, pero yo no podía hacer nada con respecto a eso. Era lo que yo sentía y no podía mentirle.
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MI HERMOSO ERROR (G!P)
RomanceJennie Kim ; es una joven de 24 años, acaba de terminar su carrera de diseño y moda. Hija menor de una familia muy bien posicionada económicamente. Lalisa Manobal; una mujer magnate de los negocios, de 31 años, viaja a Corea para cerrar negocios con...