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Ir de compras para la boda con su madre y la señora Black fue la experiencia más incómoda de la vida de Cassie. Las dos mujeres tenían gustos diferentes y hacían comentarios sarcásticos sobre las elecciones de la otra. Si Cassie no hubiera encontrado el vestido que era mutuo, los dos se habrían arrancado el pelo.
—¿Por qué no puedo verlo?— Regulus se quejó por quinientas veces esa noche. Sus brazos rodeaban a Cassie mientras besaba la piel de su brazo, tratando de convencerla para que le mostrara el vestido. —por favoooor—.
—¡No!— Cassie dijo mientras acercaba su cabeza a su cuello. —Nuestras dos mamás estuvieron de acuerdo en ello, lo que significa que es el vestido más hermoso que jamás haya existido—.
Regulus rió disimuladamente.
—O el más espantoso—.
Cassie parpadeó antes de reírse, el sonido resonó dentro de Regulus.
—Bueno, me encantó. Crees que tengo buen gusto, ¿No?—
—Bueno, obviamente—, dijo Regulus antes de trazar la línea de la mandíbula de Cassie y besarla. Cómo terminó Cassie a horcajadas sobre él era un misterio. —Después de todo, me amas—.
En una ocasión normal, Cassie le habría golpeado el hombro, se habría quitado de encima y habría dicho algo como "sí, no importa". Excepto que estaba drogada con la fiebre de la boda. Claro, ambos estaban en la cama de Regulus pero ambos tenían la mente puesta en la boda en 3 días.
La boda está programada para este sábado en La Mansión Greengrass. No hay clases los lunes y martes debido a un feriado, por lo que Dumbledore les había permitido a ella y a Regulus regresar el martes por la noche.
De domingo a martes, los dos tendrían una corta luna de miel. Regulus insistió en que debería planificarlo y que será una sorpresa.
—Ahora, ¿Qué está pasando por esa linda cabeza tuya?— Regulus tarareó mientras pasaba los dedos por su cabello. Cassie todavía estaba a horcajadas sobre él mientras lo rodeaba con sus brazos, acercándolo.
—Nos vamos a casar—, murmuró Cassie tan cerca de su oído que Regulus pudo sentir un escalofrío. —¿No fue ayer que me dijiste que no estábamos en un matrimonio sin amor?—
—Tenía razón en eso, ¿No?— El se ríe suavemente.
Cassie tarareó de acuerdo.
—Yo—, ella le besa la frente. —Te—, su mejilla izquierda. —Amo—, su mejilla derecha. —Regulus—, el lado derecho de su mandíbula. —Arcturus—, el lado izquierdo de su mandíbula. —Black—, y ella lo besó con tanta pasión en los labios.
Ella lo amaba. Ella lo amaba a él y a sus partes malas.
El sí la amaba. El la amaba a ella y a sus partes malas.
Sólo esperaban que su amor fuera lo suficientemente fuerte como para sobrevivir a esta guerra abandonada.
