∆ Lirio de Fuego ∆

Capítulo 2: Huerto inmutable

-Parece que está tratando de tentarte.- All Might le dijo, fácil y despreocupado.

Era un sábado por la mañana. Estaban sentados en un banco al costado de un camino de grava en el círculo más externo, e Izuku se había estado secando el sudor de la frente en ese momento. Su mano se congeló cuando las palabras salieron de los labios de su mentor, la sangre abandonó su rostro cuando sus ojos se abrieron como platos. Abrió la boca para hablar, pero antes de que pudiera pronunciar una palabra, All Might continuó.

-¡No, no!- Exclamó apresuradamente, agitando las manos. -No es algo malo... bueno, a menos que haya funcionado, pero...

La garganta de Izuku hizo un ruido, estrangulado e involuntario.

-¡Pero ese no es el punto que estoy tratando de transmitir!- Continuó. -No tienes nada de qué preocuparte, Midoriya. De hecho, ¡esta podría ser una gran oportunidad!

Izuku se detuvo y se volvió para mirarlo con expresión desconcertada.

-... ¿Q-Qué quieres decir?-

-Bueno...- Hizo un gesto vago y sin sentido. -Estás en una situación única. No muchos ángeles de primer nivel entran en contacto con demonios, ya sabes, y mucho menos el mismo varias veces.- Él explicó. -Si puedes demostrar que eres capaz de resistir la tentación, eso seguramente te hará destacar cuando el consejo te revise para la ascensión.

Izuku parpadeó un par de veces rápidamente.

-¿De verdad lo crees?- Preguntó, entrecerrando los ojos.

-Lo sé.- mantuvo contacto visual con él durante un rato y luego miró hacia otro lado.

-¿Pero no es algo peligroso?- El siguió. -Quiero decir, ¿y si me ataca?

All Might pensó, frunciendo el ceño por un momento.

-Entiendo tu preocupación.- Dijo, luego suspiró, recostándose en el banco. -Es una pena que no nos permitan dar instrucciones de combate a los ángeles por debajo del segundo nivel.

Izuku guardó silencio por un momento. Se miró los pies, arrastrándolos ociosamente sobre la grava.

-Es... no sólo eso. Yo sólo...- Se mordió el labio y los dedos se enredaron en la tela de sus pantalones mientras se debatía si debía o no expresar sus preocupaciones. -Siento que...- Suspiró -Como si hubiera... tantas cosas que no sé sobre los demonios.- Dijo finalmente, y luego soltó una risa incómoda. -Incluso él parecía sorprendido.

All Might volvió a pensar.

-En ese sentido, el plan de estudios deja mucho que desear.

Sintió que parte de la tensión se aliviaba de sus hombros.

-¿Por qué no nos enseñan estas cosas?- presionó Izuku. -Quiero decir, parece que... no lo sé.- Exhaló con fuerza, pasando los dedos por su cabello húmedo de sudor. -Estoy seguro de que hay buenas razones para ello, por supuesto. Es sólo que, desde mi punto de vista, se siente... innecesariamente arriesgado.

-Es complicado.- All Might respondió.- La razón oficial es que quieren evitar que información confidencial caiga en manos equivocadas. Pero, sinceramente, incluso siendo alguien que ha trabajado estrechamente con los superiores, algunas de las restricciones todavía parecen algo arbitrarias.- Dijo, luego se encogió de hombros.- Seré el primero en admitir que puede resultar bastante frustrante. Pero así es la sociedad.

Izuku asintió y por un momento permaneció en silencio. Un par de mujeres pasaban charlando animadamente. Esperó hasta que sus voces se alejaron en la distancia.

-¿Estás...?- Comenzó, luego se aclaró la garganta y habló en voz baja. -¿Conoces algo llamado "criptospección insidiosa"?

Durante varios segundos, All Might no respondió. Izuku estaba seguro de que si lo mirara, lo encontraría mirándolo con la boca abierta, pero mantuvo su mirada fija en la grava bajo sus pies.