¿Nuestra hija...? Nimona [Ambrosio x Ballister]

𝔼𝕝 𝕗𝕦𝕥𝕦𝕣𝕠

La pelirosa dibujaba sentada en la cama, disfrutando de un chocolate caliente que le había traído Ballister, frente a ella Ambrosio descansaba tomando la mano de su pareja que acariciaba sus rulos dorados con delicadeza mientras leía un libro, su estado estaba mejorando así que sería dado de alta pronto, el centro de apoyo que se hizo en la academia ya no era requerido ya que la tormenta de nieve se redujo con el pasar de los días, ahora las personas del reino disfrutaban de los días nevados cercanos a Navidad, Nimona también se encontraba emocionada -aunque no lo demostraba- ya que sería su primera navidad con su nueva familia.

- ¿Qué dibujas, pequeña? -el susurro Bal logró que despegara los ojos del cuaderno.

- A ustedes...

Aquella respuesta logró despertar a Amborsio, que se enderezó emocionado.- ¿¡Puedo ver!?

La pelirosa sonrió sonrojándose al pasarles el cuaderno, bebiendo más chocolate para evitar sus miradas.

- Está muy lindo, -halagó el moreno deslizando sus dedos metálicos sobre el contorno del dibujo- eres muy talentosa.

- Vamos... -restó importancia al ponerse de pie- no es así de bueno.

- Nimona, -interrumpió Goldenloin- esto es increíble, eres muy buena, aunque ya lo habíamos notado con las pinturas de tu habitación.

- ¿Nunca quisiste estudiar artes?

- No creo que sea lo mío... -tomó su cuaderno de forma delicada pero firme- es solo un hobby, si fuera mi ocupación seguro me aburriría.

La chica se fue en dirección al baño para no seguir con aquella conversación, ya que siendo sincera ella sí deseaba practicar más con las diferentes técnicas que había conocido durante todos sus años de vida, el arte era su medio de expresión favorita, cuando plasmaba sus sentimientos de esa forma era más fácil que hablar.

Quería volver al palacio, ya habían tenido una semana larga en aquel hospital, recibió la visita de Troy la tarde anterior, fue quien le llevó un cuaderno y un estuche de lápices, ya que hablando por teléfono le habían hablado sobre la investigación en todas las entradas del castillo que estaba siendo asegurado al máximo desde el casi asesinato del rey, por lo que no pudo siquiera ir a su habitación por ropa o algo así, Bal tuvo que conseguir cosas de primera necesidad para los tres.

- Ya que te aburres puedes dibujar algo que te guste... -el castaño jugaba con sus manos evitando la mirada de la pelirosa- no sabía si querías colores... debí pensar en colores... ¡te los puedo traer mañana!

- Troy... esto es perfecto... -abrazó aquel cuaderno de pasta dura- muchas gracias.

- ¡Que bien! -sonrió aliviado apoyándose en la ventana- esperaba que te gustara, ¿cómo está su majestad, Ambrosio?

Volvió a la realidad al escuchar un mar de preguntas y flashes inundar el pasillo fuera del baño, camarógrafos y reporteros atacaban al rey con preguntas mixtas referentes al ataque y su compromiso.

- El agresor no ha sido encontrado, -inició una mujer de anteojos- ¿se siente a salvo, majestad?

- Nuestros mejores investigadores ya han abierto un caso para dar con su paradero, -indicó Ambrosio al margen de la habitación, tenía puesta ropa un tanto formal/casual- me siento totalmente seguro teniendo al director Sir. Ballister y nuestra mejor cadete Lady Nimona.

- ¿Como podremos saber que esto no volverá a pasar?

- ¿Acaso tendremos un heredero que no posea la sangre directa de Gloriana?

- ¿Acaso pretende que "Lady Nimona" sea la heredera al trono?

Hubo un silencio incómodo luego de la última pregunta, la cual dejó a la pelirosa confundida, ella no podría ser reina.

¿Verdad?

- Sé que el anuncio de mi compromiso ha causado todo tipo de revuelo, pero dar información sobre el que será o es el heredero al trono es precipitado en este momento, -a pesar que inició con un tono calmado se enderezó dando una mirada decidida- no toleraré que se hostigue a mi familia con cuestiones sobre el futuro del reino, mi intención no es otra que ser un buen líder y espero que comprendan que no es solamente por que la sangre de Gloriana corre por mis venas.

Los temerosos reporteros intrusos se alejaron del lugar gracias a la escolta del rey, ya que habían vuelto luego de escuchar sobre el ataque que hubo. En su camino de vuelta al palacio, Nimona sentía la necesidad de preguntarle a sus padres sobre lo que había pasado en esa "conferencia" pero tampoco quería presionar a Ambrosio y afectar su recuperación.

- ¿Seguros que estaremos bien? -cuestionó la de pecas ayudando al rubio a recostarse.

- Nada volverá a pasar como aquella vez, -convenció este dándole una sonrisa, al verla tan preocupada solamente quería que se sintiera a salvo- la guardia real nos protegerá, y también los tengo a ustedes ahora que soy un blanco fácil.

- No digas eso, -regañó el moreno entrando con una bandeja de comida- ya se aseguraron todas las entradas y salidas, estamos seguros.

Nimona sonrió un poco más tranquila, permitiéndose pasar una tarde de películas con sus padres. El castillo era seguro ahora.

¿Acaso también era seguro salir?

Se les quiere <3

Mudarse es un asco, he tenido problemas con el antiguo dueño, no tengo estufa por lo que vivo a base de cereales, sándwiches y comida rápida -cigarros ya no- tengo cosas aún en cajas y sigo encontrando cosas que ni sabía que tenía.

Actualización de estado:

AYÚDENME ME DESESPERA EL DESASTRE.

Les amo, gracias por la espera.