Capítulo 14

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Después de pasar la tarde haciendome la manicura y todo tipo de tratamientos capilares junto a mi prima Ava llamemos a Andrew que no tardó en aparecer con uno de los coches de mi padre.

Primero llevó a Ava a casa que después de varias horas interrogando me sobre mis citas con Jason en el salón de belleza, continuó con sus preguntas y comentarios como el de ''ni lo dudes primita tienes que ir más allá, es el chico perfecto para que pierdas la virginidad'' que hizo que Andrew se saltara un semáforo en rojo impresionado por la tranquilidad con la que Ava soltó aquello y que provocó que yo pasara el resto del trayecto roja por un tomate no se si por la vergüenza o por todo lo que se me removió por dentro al darme cuenta de que si Jason quisiera llegaría mucho más lejos de lo que había llegado con ningún chico, Andrew también dijo que le parecía un buen chico.

Dejemos a Ava en su casa después de acordar que Andrew me llevaría a casa de mi prima al día siguiente, diriamos a nuestros padres que íbamos a ir al cine y a cenar juntas cuando en realidad yo iba a salir a cenar con Jason y Ava con un rubio surfista que había conocido hacía unos días...


Pocos minutos antes de llegar a mi casa justo cuando paró el coche en un cruce, recibí un sms.


Tenía una comida mañana que acaban de anular así que pensé que podríamos ir juntos. Tengo reserva en el mismo restaurante donde estuvimos hoy. Si no te apetece los planes de salir por la tarde e ir a cenar siguen en pie.


Jason Campbell



Rápidamente respondí sin pensar en que excusa iba a poner ya que la de la cena estaba clara mi coartada era Ava ¿Pero y al mediodía? Ni tampoco pensé en que aquel restaurante estaba muy cerca de la oficina de mi padre...



Nos vemos en el restaurante al mediodía ¿Pero a que hora?


Phobe Grey



Pocos segundos después recibí respuesta.


A las 13:30 nos vemos allí, ya que tenía una reunión con unos clientes muy importantes tenía un reservado así que no te preocupes por nada.

Nos vemos mañana preciosa.


Sonreí porqué no sabía como pero parecía que me leyese la mente, era todo tan fácil con Jason.


Llegué a casa y me fui directa a la piscina a nadar un rato. Pasé un buen rato hablando con mi madre sobre su trabajo, sobre libros y sobre mil cosas más...


Cuando la cena estuvo lista los cuatro nos sentemos a la mesa, me sentía tan bien en esos momentos en los que estábamos los cuatro juntos charlando de todo de como había ido el día, de una noticia de cualquier cosa...


Cuando mi padre nos estaba contando la adquisición de una pequeña empresa que estaba casi en la ruina pero para la que mi padre tenía grandes planes, sonó el teléfono de Ted.


Mi hermano se levantó un momento a contestar la llamada, yo seguí charlando con mis padres, fascinada como siempre con el talento de mi madre para saber ver antes que nadie el talento de escritores noveles y saber a quien brindar su apoyo, y por las ideas y proyectos de mi padre.

La sombra de la pequeña GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora