Adalia se encontraba con la mirada baja mientras escuchaba como su padre la regañaba por haber sido tan imprudente al momento de reclamar aquel dragón, el cual se entronca a unos centros de distancia detrás de su nuevo jinete, pero la pelirroja no se arrepiente de nada.
Por que que es la vida sin un poco de riesgo?, sería completamente aburrido.
Adalia alzó la mirada, y vio como sus tío Peter la miraba con una mirada divertida y a la ves con preocupación, después vio la mirada de culpa que sus hermanas le daban y eso la molesto, ella fue de la idea no ellas.
También vio la sonrisa burlona de su ¿Tío Aegon?, el cual estaba al lado de su Abuelo, y Adalia vio la oportunidad, le dio una mirada de ayuda con una mirada de perro atropellado al Rey Viserys, su Abuelo.
--- Un día, apenas llevamos un día en este mundo y tu ya te metes en problemas--- dijo Jordan, y seguirá regañando la si el Rey no diera un paso a delante, así llamando si atención.
--- Dejala--- dijo el Rey mirando a Jordan--- Mi nieta sólo estaba reclamando algo que merece desde su nacimiento--- dice en doble sentido---- En vez de estaría regañando, ay que festejar, que mi nieta y sobrina reclamaron sus dragones---- sonrió hacia si nieta y sobrina, las cuales le dieron una sonrisa.
Viserys miro a su esposa, la cual a siente con una sonrisa, sabía lo que su esposo la acaba de pedir.
Mientras que Jordan soltaba un suspiro cansado, sin Noah a su lado no podía controlar a pelirroja que tiene como hija, entre el y Noah, Amalia respetaba más a Noah.
--- No te enojes conmigo papito lindo de mi corazón--- dijo Adalia después de dejar un beso en la mejilla de su abuelo--- Tu sabes que yo te quiero mucho mucho--- le da una sonrisa para nada inocente y bate sus pestañas.
--- No caigas de nuevo Jordan!!--- le gritó Peter con una sonrisa burlona, conocía muy bien a esa joven de cabellos rojo fuego, el la crío y sabía sus mañas.
Pero ya era tarde Jordan ya cayó en la mirada de perro atropellado de su pequeña y dulce hija, Jordan la abrazo y le dio un beso en la frenen.
--- Pero eso evita que estés castigada---- le dice el sabueso del infierno a su hija con una mirada sería.
--- Y cual sería mi castigo?--- le pregunto con una mirada de rendición.
--- Nada de practicar Arqueria por dos Lunas --- dijo Jordan mirándola.
--- ¿¡QUE!?--- gritó Adalia, pero después se quedó en silencio al pensarlo mejor, no la castigó con quitarle la música o volver a montar en Dragón--- Lo tomo pero me ofende muchísimo!--- le dice Adalia, para tomar la mano de Rhaena y la de Kira, para comenzar a caminar hacia el castillo, no sin antes despedirse de los demás.
Las demás chicas siguieron a Adalia, ya que Irán a la habitación de la pelirroja a hablar y conocerse más.
Adalia para de caminar y vio a la que es su tía Heleana con una sonrisa le extendió la mano.
---Vines tía Hela?--- le pregunta sin bajar su mano hacia ella.
--- Me encantaría--- le responde Heleana con una sonrisa y tomando la mano de la pelirroja, así logrando que la familia se la peli blanca la mirada con asombró.
Menos el Rey que sonrió ante eso, Feliz que su Familia este completa.
--- Sabes bien que no te hará caso verdad?--- le dice Peter a Jordan.
Los que estaban ahí miraron a los dos hombres con curiosidad ante los dicho por Lord Hale.
--- Lo se --- le responde Lord Parrish, soltando un gran suspiro --- No se donde salió tan rebelde --- dijo Jordan para salir de ahi h ir donde está aquella bruja, Peter rio y fue detrás de el.
El Rey Viserys miro a su hermano con una sonrisa burlona, la misma sonrisa que compartió con Lord Corlys.
--- Dicen que la primera hija siempre se parece al padre --- dijo Viserys para después irse con si esposa e hijos de ahi.
Daemon puedo sentir como su hermano dijo aquello para que se sienta mal, cosa que logró pero no lo demostró.
Unos horas después, las chicas se encontraban riendo y comiendo bocadillos en la habitación de la pelirroja.
Mientras la Reina con ayuda del gran Maestre, estaban enviando invitaciones por todo el Reinó, para un torno en honor a Adalia y Rhaena (a ella por haber reclamado un dragón), y Adalia por su legitimación.
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