Extra (5)

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Al principio, cuando Kan Chaosheng dijo que esas pocas personas eran traficantes de personas, Deng Po no lo creyó. En su mente, los traficantes de personas solían ser muy astutos; podían desaparecer fácilmente entre la multitud en un abrir y cerrar de ojos, sus habilidades casi rivalizaban con las de los agentes secretos. Pero Kan Chaosheng, aparentemente impaciente por dar más explicaciones, se limitó a chasquear los dedos delante de él.

Y entonces, Deng Po presenció el espectáculo más aterrador de su vida.

Una serpiente gigante, indistinguible de si era una pitón, una serpiente o incluso un dragón, apareció de la nada. Abrió su enorme boca y se abalanzó sobre él. Sin embargo, cuando la serpiente le alcanzó, no se lo tragó entero, sino que de repente se transformó en pequeñas estrellas, desapareciendo en el aire.

Deng Po se quedó mirando al frente; sus piernas flaquearon y ni siquiera pudo correr. Cayó al suelo, dándose cuenta de que cuando la gente se asusta hasta cierto punto, ni siquiera puede gritar.

Kan Chaosheng, que inicialmente se sentía bastante engreído, cambió su expresión cuando vio la reacción de Deng Po. De repente, recordó que Long Shen le había advertido que no usara la magia para asustar a la gente corriente de fuera. Se sintió un poco culpable.

"¿Estás bien? Es una ilusión; no es real".

Deng Po tardó un poco en levantarse. Kan Chaosheng no tuvo más remedio que ayudarlo a levantarse, con cara de disgusto pero incapaz de resistirse a explicarse.

"No me creías, así que te lo mostré. No esperaba que fueras más tímido que Dong Zhi".

"¡¿Quién demonios eres tú?!"

Deng Po finalmente recuperó el aliento y se recompuso. No sabía quién era ese Dong Zhi que mencionaba la otra persona. Sólo sabía que estaba muerto de miedo. ¿Quién podía permanecer tranquilo después de ver a una serpiente gigante arremeter contra él? Especialmente porque él había tenido miedo de las serpientes desde que era un niño.

"Te lo diré después de que los denuncies primero a la policía", dijo Kan Chaosheng. "Realmente son traficantes, sólo que atrapados en una ilusión como tú".

Deng Po dudó un momento, luego llamó a la policía y explicó la situación. Sólo dijo que esas cuatro personas le parecían sospechosas y que se había dado cuenta de que el niño dormía constantemente, y que a los cuatro adultos les daba igual.

Dado que se trataba de trata de seres humanos, la policía se lo tomó en serio. Tras interrogarlos, descubrieron que, efectivamente, el niño había sido secuestrado. Lo habían drogado y por eso dormía. Estas cuatro personas se hacían pasar por trabajadores emigrantes que volvían a casa y habían cometido numerosos secuestros.

Sin embargo, Deng Po se enteró más tarde de más detalles por el agente de policía con el que contactó. Fue elogiado por su vigilancia e incluso recibió un reconocimiento y una recompensa.

Tras entregar el asunto a la policía, Deng Po no necesitó involucrarse más. Él y Kan Chaosheng volvieron a su compartimento. La pareja que había salido con el niño en busca de un médico aún no había regresado. Probablemente se habían bajado en alguna estación. Sólo quedaban ellos dos en el compartimento. Deng Po tragó saliva con nerviosismo.

Kan Chaosheng ladeó la cabeza y le miró. "Eres muy listo".

Nunca expuso su identidad de principio a fin.

Teniendo en cuenta que Kan Chaosheng actualmente aparece como un niño, si denunciara el incidente, inevitablemente tendría que explicar cómo llegó a saberlo. El hecho de que viajara solo con un pulpo saldría a la luz. Se le pediría que bajara del tren para ponerse en contacto con sus tutores o tendría que aclarar su identidad. Para el mundo exterior y muchos departamentos de base, era como si la Oficina de Administración Especial nunca hubiera existido. La policía sólo pensaría que estaba mintiendo, o tendrían que pasar por múltiples estratos para verificar su identidad, lo que sería muy problemático. Pero después de cargarlo todo sobre Deng Po, las cosas se simplificaron mucho.

Bu Tian GangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora