Convenientes

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Hace 30 años atrás...

Las almas humanas eran un misterio para muchos de los que investigaban sobre aquella extraña condición, llamandolos nigromantes, no eran más distintos a los alquimistas, estos últimos estudiaban la ciencia pero la nigromancia era sobre las almas humanas, cierta persona de cabello rojo trataba de investigar sobre aquello por la petición de Hohenheim quien lo acompaño en su travesía, aquello empezaba a ser de sumo interés para el rubio, a Cross no le interesaba mucho básicamente lo odiaba, gracias a ello pudieron notar cierto detalle a profundidad con esos estudios.

–Sabia algo sobre llamar a las almas de los muertos... Pero nunca pensé que algo así fuera posible –dijo Cross dejando el libro a un lado.

–¿Has encontrado algo? –pregunto Hohenheim dejando el libro a un lado, aquella biblioteca pertenecia a un viejo doctor cuya familia ya no cedía a más que a un par de niños presumiblemente hermanos, esos pequeños eran herederos a dicha biblioteca cuyos libros no eran más que diarios de investigación de dicho doctor.

Ambos hermanos jugaban afuera mientras dentro había un par de personas sospechosas leyendo en su biblioteca, no hacía más de un año que el doctor había fallecido dejando a los dos niños solos.

–Si que son extraños... –dijo el menor de los niños, él cabello del niño era color negro, y un poco alborotado.

–¿Quienes? –dijo el mayor de cabellos lacios y castaños.

–Esos sujetos que vinieron a pedir nuestra biblioteca, no me digas que no es raro Maná.

–Tal vez solo vinieron a hacer sus investigaciones como varios otros tipos más... –dijo el mayor tratando de explicarle al más joven la situación.

–Si pero hay algo distinto en esos dos... –dijo Neah cuya atención se centraba en ver las ventanas que daban la vista dentro de la biblioteca.

Ambos chicos decidieron acercarse, a dónde estaban esos hombres mientras escuchaban con toda atención lo que tenían por decir.

–Escucha si puedes crear un cuerpo humano con alquimia y utilizar la nigromancia para llamar el alma de un muerto, básicamente crearias vida.

–Si, pero dicha vida ya no sería humana –admitio Hohenheim.

–Pero tampoco sería un Humunculo, ya que este contaría con alma... ¿entonces que podría ser?

–Hasta el momento es ilegal hacer está clase de prácticas Cross... –admitio Hohenheim, pero este conocía a ese sujeto, había utilizado la nigromancia para utilizar la inocencia de María.

–Tks, Hohenheim no me dejas imaginarlo.

Los dos hermanos veían a lo lejos a los dos hombres discutiendo, la curiosidad les carcomía las entrañas, se acercaron hacía ese misterioso par, ambos chicos eran de la misma edad y estatura.

–¿Que pasa? –pregunto Hohenheim al ver a ese par de chicos muy interesados en lo que hablaban.

–Nada solo que nos interesamos sobre la conversación que tenían... Podrían explicarnos un poco más –dijo Maná mientras Neah iba más haya y tomaba uno de los libros que leían aquellos hombres.

–Son asuntos no aptos para niños pequeños como ustedes –dijo Cross quitándole el libro a Neah de las manos.

–Marian no seas grosero, es su biblioteca.

–Pues que lean los libros en lugar de estarnos preguntando –dijo dejando el libro cerrado a un lado.

–Se nota que no tienes paciencia con niños –Dijo Hohenheim mientras veía a Maná sentarse a un lado leyendo el libro completamente serio, mientras Neah ojeaba todo examinando el libro.

Mi Alma Gemela II (Allward)Where stories live. Discover now