Del fanon a ser canon

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Cuando Lionel regreso a su hogar a las 2:30 encontró todo en silencio, reviso la sala, cocina, comedor pero no había nadie.

Comenzó a preocuparse un poco debido a todo lo que sucedía.

- Ochoa - estaba preocupado.

Dejo su maleta deportiva en el sillón y luego se dispuso a subir las escales.

- ¿Ochoa? - no dejaba de preguntar el apellido de su esposo y entre en más cuartos entraba más preocupado se ponía.

Y esto se veía reflejado en su tono de voz, llego hasta el dormitorio que compartía con su pareja cuando lo vio salir del baño con una toalla atada a su cintura, una toalla pequeña en su hombros y sus rizos mojados, suspiro aliviado.

- ¿ocurre algo Lío? - pregunto colocándose su camiseta.

Lionel se dió cuenta de la maleta a medio a hacer que descansaba en la cama, volteo a ver a Guillermo que buscaba sus prendas de abajo para acabar de vestirse, parecía tan concentrado en encontrar la ropa adecuada aunque en realidad solo estaba revisando el armario pues no quería enfrentar a Lionel.

- ¿Guille? - el portero emitió un sonido nervioso en señal de que lo escuchaba - ¿Porque haces una maleta?

Sus manos temblaron y tomo el primer short que encontró para ponérselo rápido, volteo a ver a Messi que esperaba una respuesta congruente.

- ay Lio, debo volar ahora mismo a Italia, al parecer esto de desaparecer por un día entero y horas no le gusto a mi manager - Lionel observo como el mexicano comenzaba a tomar algunas cosas y las metía en la maleta.

Frustrado tomo asiento en el borde de la cama mientras veía la maleta casi terminada.

No es que lo pueda retener, Guillermo no lo hizo cuando el se unió al salernitana y el seguía decidiendo en si regresar al PSG, conseguir otro equipo o retirarse, Guillermo no lo presiono a seguirlo y el no lo haría tampoco.

Pero aveces le gustaría estar más tiempo con su ahora esposo, más que unas semanas, sintió la mano de su esposo acariciar su mejilla mientras que con la otra jugaba con su barba, haciendo que desvíe su mirada hacia su pareja que le sonría, no pudo evitar recordar porque llevaba barba.

Esa que dejó crecer por puro capricho de Guillermo que lo convenció que se veía guapo así.

- No pongas esa cara pulga - solo pudo suavizar su rostro ante la petición de Guillermo.

Cuando se ponía pensativo y la melancolía acompañaba aquellos pensamientos solia fruncir sus labios en señal de frustracion.

Cosa que a memo no le gustaba, mucho menos cuando era por su culpa, era un hábito que el argentino tenía desde que lo conoció y que aveces lo hacía sentir mal respecto a su decisiones, pero jamás dudo cuando Lionel le decía que no era su culpa.

Lionel jamás le mentiría con un tema así, este solo acaricio su mano que descansaba en su mejilla para sonreírle causando que memo le corresponda el gesto con un beso en la frente.

- Te extrañaré - guillermo sabía que era verdad - ¿Vendrás a mi debut?

Guillermo sonrió un poco.

- Siempre estoy presente en tus debuts, ¿no?

- no recuerdo a verte visto cuando debute con el barca - Guillermo soltó una carcajada y siguió jugando con su barba.

- siempre estuve ahí Lionel - soltó Guillermo burlón - es solo que en aquel entonces no sabías que yo sería tu ser amado - Lionel abrazo su cintura acercándolo a el.