Del fanon a ser canon

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Messi miraba el juicio con mucha seriedad y en total silencio moviendo con desesperación su pierna, ya iban muy avanzados en el caso y si bien la mujer había querido inventar algunas cosas con respecto a su marido.

Su teatro se cayó dejando ver qué era una mitómana de primera, Guillermo jamás haría algo como eso y eso de que la agredió físicamente era una blasfemia horrible.

Suspiro un poco para ver a su esposo, memo se veía muy bonito y concentrado en el juicio.

— Señor Ochoa suba al estrado - el mexicano asíntio y se puso de pie mientras un policía lo escoltaba.

Subió al estrado en silencio tomo asiento colocando su mano sobre una réplica de la constitución y alzó la otra.

— por favor recite esto - el mexicano escucho paciente lo que le instruyó su abogado para dar un suspiro.

— Yo Francisco Guillermo Ochoa Magaña juro decir la verdad y nada mas que la verdad y si no fuera así estoy dispuesto a recibir el castigo correspondiente - retiro su mano de la constitución y luego volteo a ver a su abogado.

— Señor Ochoa, buenas tardes - el jugador correspondió su saludo de forma pacífica bajo la atenta mirada del juez y el juzgado.

— Señor Ochoa¿Porque quiere demandar a la señora Rodriguez? - cuestino mientras miraba al hombre.

— Desde aquella entrevista en el 2014, llevaba hostigandome, no para de involucrarse en mi vida privada y mentir respecto a lo que hago o dejo de hacer - tomo un suspiro - sus noticias acerca de mi escalaron hasta un grado en el que me metió en problemas con mi pareja y perjudicó mi vida privada y pública.

— Pude notar que menciono e y cito " Me metió en problemas con mi pareja" ¿Tiene pareja? - el asíntio con un pequeña sonrisa - ¿Que tipo de relación llevan? y si no es indiscreción ¿Quien es?.

— Estamos casados y el nombre de mi pareja es Lionel Andrés Messi Cuccittini - los murmullos no se hicieron esperar - agradecería mucho si está información no sale de aquí.

El juez golpeó con su mazo poniendo la calma otra vez volteo a ver a Ochoa y le otorgó una sonrisa tranquilizadora.

— tenga por seguro que no saldrá nada de este juzgado - memo agradeció con su cabeza.

— Objeción - el juez le otorgó la palabra a la abogada - ¿Que tiene que ver su relación con Messi aquí?.

— es cierto abogado explique - dijo el juez y la abogada canto victoria

— vera señor juez, así como a manchado la carrera de mi cliente metiéndose en su vida privada también lo hizo con la vida del señor Messi poniendo en riesgo su matrimonio y por si fuera poco infiltrandose en su boda que era PRIVADA.

— Objeción–

— No a lugar licenciada prosiga abogado - el hombre asíntio y suspiro para relajarse.

— Señor Ochoa ¿En qué afectó todo esto a su matrimonio?

— comenzando con que casi no me caso - el juzgado tomo nota - Luego de que me metió en una polémica en dónde según ella pase la noche con una mujer estando en una relación con mi esposo nos distanciamos antes de siquiera ponerle fecha a la boda.

— eso me afectó demasiado...

El juez reviso el expediente psicólogo de Ochoa dónde le habían detectado ansiedad, depresión y estrés severo durante esas épocas además de que intento quitarse la vida por todos los comentarios hirientes que recibió además de la corta separación que sufrió de Messi, incluso su expediente de salud delataba que no había estado bien y que había sufrido graves cambios en su cuerpo a causa de no ingerir alimento nutritivo para el.

— ¿Eso afectó a otra cosa en su vida?

— si, me detectaron varias cosas con respecto a mi cuerpo, como anemia y bulimia, además de que si la polémica seguía así me sacarán de la selección.

— ¿Las notas de la señora Rodriguez afectaron a sua allegados?.

— Ciertamente si, al establecimiento de mis padres llegaron un montón de gente queriendo agredirlos, además de esto afectó la carrera de mi esposo en demasia.

— es todo su señoria - el juez asíntio aún en una sorpresa grande.

El abogado tomo asiento y la abogada se puso de pie, saludo al hombre y luego reviso las preguntas que tenía preparadas.

— Señor Ochoa ¿Que hacía en esa fiesta?

— Salí a divertirme con mis amigos un rato, con Javier Hernández y Miguel Layún, no sabía que llevarían a sexoservidoras.

La mujer asíntio para pensar un poco.

— aún así sabiendo la fama que tiene el jugador Javier Hernández con respeto a estás clases de fiesta y sabiendo que no tenían permitido ir a fiestas ¿Decidió seguirlos?.

— Si, pero no porque no fuera conciente la fama que tiene mi amigo, simplemente me prometieron que no pasaría nada de lo que termino ocurriendo, además en ningún momento se nos prohibió salir de fiesta.

— Señor Ochoa, usted era conciente de que estaba en una relación con el señor Messi, y aún así ¿No sé retiro cuando estás mujeres llegaron?

— ciertamente no, quería quedarme un poco más a la fiesta, sabía que no pasaría de eso, una fiesta, además no ingerir más allá de algunos shots de tequila y tampoco me involucre mucho.

— Dígame ¿Que hizo luego de la fiesta?

— cuando salimos del bar le llamé a guardado cuando estos dijieron que irían a otro lado, el llegó a recogerme luego de un rato y me llevo a la concentración.

— ¿Y una vez ahí que paso?

Todos estaban a la expectativa de lo que ocurría y como la mujer se desesperaba más por obtener más información.

— Cuando llegamos había una fiesta en el cuarto de hotel, algunos compañeros salieron de el al ser casados y no querer estar comprometidos con ese problema y nos fuimos a hospedar en un hotel muy económico, pasando la noche ahí.

— si me lo permite su señoría - llamo la atención el abogado - este video lo explica mejor.

En una pantalla se proyecto ese vídeo que Messi había tenido en su poder desde que decidió investigar que había pasado aquella noche con su pareja, en el vídeo se mostraba todo lo que Ochoa narro, luego de ahí cámaras de seguridad del hotel que mostraba los últimos momentos de los jugadores antes de abandonar el recinto.

— Bien - el juzgado tomo nota - algo más abogada.

— No señor juez - la mujer se retiró y Ochoa bajo el estrado.

— señor Messi suba al estrado.

Messi se puso de pie, ajusto su traje y camino hacia el estrado siendo escoltado por un policía.

Está listo para decir la verdad y nada más que la verdad.

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N/a

Hace un frío del carajo.