Del fanon a ser canon

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El debut de Messi fue lo mejor que le pudo a ver pasado al Inter de Maimi, su debut estaba en boca de todos y se había registrado como un evento en dónde fue demasiada gente.

Memo por el contrario consiguió su permiso para quedarse toda la leagues cup.

Al final termino la fase de grupos donde el Inter le dió una goleada al Atlanta United con un 4-0, Messi fue el protagonista de dos de los goles.

Memo no podía estar más feliz y siempre que podía portaba el uniforme de su esposo, aunque también fue una locura para Messi al ver a memo tan feliz con la cara pintada de azul y amarillo con una de sus camisas del América.

El 31 de julio dos días después de que ellos clasificaron para seguir en la leagues cup, se encontraba descansando en el sofá del hotel mientras veía su novela, cuando su esposo salto a sus piernas y lo tomo por sorpresa cuando repartió un montón de besos por su rostro, pero no se quejo.

- ¿Porque estás tan feliz Guille? - pregunto Lionel con una sonrisa.

- no es obvio, clasifico el ave - Lionel reprimió una risa ante el tono de molestia pero felicidad de su esposo.

Claro que noto que Guille llevaba el uniforme del América, pero aveces le gustaba hacerlo enojar, aunque su felicidad paso al ver a Guillermo nervioso.

- ¿Que tenés Guille? - con delicadeza tomo su mentón y alzó su rostro.

- es solo que... quería decirte algo.

- anda dímelo - tomo de la cintura a su pareja, este dió un suspiro algo triste para mirarlo a los ojos

- Quiero retirarme del fútbol - anuncio el mexicano sorprendiendo a Messi.

- ¿Hay una razón?

- bueno... - sus ojos comenzaron a cristalizarse.

Messi hizo que memo recargara su cabeza sobre su hombro, memo lo abrazo aferrándose a el mientras lloraba, el argentino acaricio la espalda del mayor dándole un apoyo silencioso, por primera vez en mucho tiempo se derrumbó frente a el.

Estaba molesto, frustrado, ¿Que pudo haber sido esta vez? ¿Podría hacer algo al respecto?, esperaba que pudiera, memo sollozaba en su hombro, se quedaron un momento quietos hasta que memo se calmo alejandose de su esposo.

- moje tu playera - soltó entre gipidos, Lionel nego y beso su frente para retirar los rastros de lágrimas de las mejillas de sus pareja.

- ¿Me dirás que pasó?

- ya me cansé Lio, quiero disfrutar otra vez el fútbol, la única forma en que lo lograre será cuando deje de hacerle casos a los malos comentarios y eso no pasará hasta que yo me retire - Messi puso una expresión de molestia para luego mirar con ternura a su esposo.

Acaricio su mejillas para darle una sonrisa suave.

- Guille, hace tiempo me mostraste que nuestras vidas no pertenecen exclusivamente al fútbol - guillermo lo vio a los ojos con culpa - y así como vos me dejaste en claro que no soy una máquina de hacer goles, vos no sos una máquina para tapar todo y dejar en ceros tu portería.

Guillermo soltó un suspiro, limpio los rastros de lágrimas de sus mejillas.

- somos humanos y si los aficionados no pueden entenderlo, es sus problema no de nosotros - beso la nariz de su esposo viendo cómo su expresión se suavizaba.

- y si esa es la desicion final que tomaste, te apoyaré en lo que quieras hacer a continuación - jugo con las manos del mexicano que soltó una risita.

- quiero tener hijos - Messi se puso rojo ocasionando que memo riera con ganas - no es broma, pero quiero tenerlos cuando estemos fijos en una casa.

- entiendo, ¿te vas a retirar?

- si, pero quiero que sea algo especial mi retiro, además ya se que haré una vez me retire.

- ¿que harás? - cuestiono Messi demasiado sorprendió.

- Quiero seguir con el negocio familiar y ejercer mi carrera - Messi le sonrió con mucho orgullo - ¿que opinas?

- opino que eres demasiado precavido amor - está vez fue el, el que beso todo el rostro del mexicano - me alegra tu desicion, no puedo esperar para tener a niños corriendo por ahí.

Guillermo rio y se puso rojito.

- ¿Quieres contarme tu plan?

Memo asíntio alegre para acomodarse mejor en las piernas de su esposo.

•••

Messi acaba de pasar a octavos de final, estaba festejando con sus compañeros cuando se le acercó Beckham a felicitarlo.

- note que tu esposo no estaba hoy - soltó David mientras caminaba junto a Messi por las instalaciones del estadio.

- está cansado, quiero que tome un descanso - soltó Messi mientras saludaba a la gente - así que le pedí que no viniera hoy.

Beckham le sonrió a Messi.

- me alegra que sean felices - Messi le agradeció y se retiró al vestuario para irse a su casa.

Beckham estaba feliz por conocer al esposo de su delantero estrella, ¿porque?, ni el sabía, pero sabía que el esposo de Messi era de renombre había dado de que hablar por su increíble carrera que llevaba hasta ese momento.

Eran la pareja perfecta, sobre todo para darle más renombre al equipo.

Messi salía ya de las instalaciones para retirarse a su casa cuando Beckham lo interceptó.

- Lío si gustas puedes traer a tu esposo mañana al entrenamiento - Messi alzó su ceja curioso aún así asíntio.

Y se despido del hombre.

•••

Guillermo observaba a su esposo muy sorprendió cuando le comento lo que le dijo Beckham.

- ¿Porque quiere que vaya?

- No lo se Guille - ambos estaban extrañados.

Se encontraban recostados sobre el sofá mientras miraban películas, memo le dió una palomita a Messi que acepto gustoso mientras abrazaba a su esposo.

- me comentó antes de irme que si ganamos la leagues cup, hara una cena, quiere que asistas a la cena en dado caso - memo le vio con el ceño fruncido.

- no me da buena espina - comento Guillermo mientras se acomodaba mejor.

- ni a mi, ni siquiera me dió tiempo a decirle que yo no asistiré a esa dichosa cena.

- Ya veremos qué hacer - se quedaron en silencio observando la película.

- Guille - el nombrado emitió un sonido para que supiera que lo estaba escuchando - Me gustan tus rizos.

Memo rio al sentir a Messi jugar con su cabello, volteo a ver a su esposo y divertido le sonrió.

- Me los cortaré - Messi nego causando que memo se ría.

- no es cierto - luego se acurrucó en el pecho de su amado - te amo.

- y yo a vos, bonito - ambos sonrieron, ahora Lionel era el único que veía la película mientras su esposo contorneaba sus tatuajes.

Al final se quedaron dormidos en el sofá abrazados, por la madrugada se cambiaron a la cama por el frío abrumador que corría por la sala.

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N/a

No sé que poner aquí.