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A Little Bit Of Magic

—¿Pero y si algo pasa? —pregunté mientras íbamos bajando las escaleras.

—No te preocupes, Iri, todo estará bien —respondió Peter.

—¿Y si sale mal? —volví a preguntar.

—¿Acaso no confías en mí, Irina? —preguntó Strange de vuelta.

—N-no es que no confíe, pero creo que... Ay no sé, señor lo noto como que no está en su mejor momento... Sin ofender —mencioné.

Strange resopló. —Claro —murmuró y siguió guiándonos.

—¿Y si...? —Peter me interrumpió.

—Iri, es la única manera... ¿Hay algo en especial por lo que no quieras hacerlo? —me preguntó y de inmediato cerré la boca.

Desvié la mirada, de nuevo volví a sentirme culpable, como si de pronto no quisiera que el hechizo se hiciese porque yo tenía un lugar en la universidad; y que Wong hubiera dicho que ese hechizo era peligroso, solo me hacía ponerme más nerviosa.

Pero tal vez solo estaba sobrepensando, tal vez todo saldría bien... Después de todo, solo era un poquito de magia, ¿no?

No podría hacerle daño a nadie... ¿Verdad?

¿Verdad?

Sacudí la cabeza. —Está bien, hagámoslo —me resigné y acepté, aunque no estaba del todo convencida... Pero si esto ayudaba a Peter y mis amigos y familia a volver a tener una vida normal; entonces lo haría.

—¿Dónde estamos? —Peter preguntó cuando llegamos a un lugar bastante oscuro.

—El Sanctum está construido sobre las intersecciones de corrientes de energía cósmica, no somos los primeros en buscarlas —explicó Stephen—, muchas de estas paredes tienen más de mil años... Y filmaron un episodio del Justiciero aquí en los ochenta.

Observé el entorno con admiración. —Bueno, estamos agradecidos que haga esto por nosotros, señor —dijo Peter.

—No me lo agradezcan... Y no me llames señor —Strange nos dio una pequeñísima sonrisa, y en una columna que estaba al centro de aquel recinto, comenzó a mover las manos empezando a invocar magia.

—Sí, perdón —Peter sonrió.

—¿Están listos? —Strange nos preguntó.

Tomé aire y asentí. Era ahora o nunca. Y mejor ahora antes de que me arrepintiera y cambiara de opinión.

—Hagalo señ- Stephen —me corregí y tomé la mano de Peter.

—Fue un gusto conocerlos, Spider-Man y Dark Heart —comenzó a mover las manos.

—¿Disculpa? —Peter habló.

Peter frunció el ceño, y yo solo miraba cómo de las manos de Strange comenzaban a salir aquellos círculos anaranjados, juntó sus dedos pulgar e índice, para después empezar a crear una circunferencia alrededor de nosotros.

—Todo el mundo va a olvidar que Peter Parker e Irina Bolshakova son Spider-Man y Dark Heart, incluyéndome —comenzó a conjurar el hechizo.

—¿T-todos? —Peter nos acercó—, ¿No pueden saberlo algunos?

—Peter, deja que haga el hechizo —lo jalé un poco de la mano.

Strange ladeó la cabeza. —Así no es cómo funciona este hechizo y es muy difícil y peligroso cambiarlo a la mitad —expresó y prosiguió.

Spider Hearts ||Peter Parker||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora