100 Dias de escritura:
"Escribe un texto donde compares tu vida
con un viaje de ida"
Recuerdo cuando era niño, e imaginaba ese pequeño hombrecito que saltaba por los árboles, casas y obstáculos que se encontraba al frente, ese pequeño hombrecito que me acompañaba en cada viaje en auto que hacíamos en familia, cada vez que me asomaba por la ventana aparecía allí para ofrecerme entretenimiento en esos largos recorridos. Ahora me encuentro viendo por la ventana de un tren observando el mismo hombrecito que al parecer el tiempo no le afecta, no envejece y sigue corriendo y saltando con la misma juventud de aquella vez.
-¿Quiero algo para tomar joven?
Niego con la cabeza y sonrío amablemente, observo la gente que esperan a llegar a su destino, unos tienen mapas que leen detalladamente, algunos andan nerviosos por el destino que les depara y a otros se les nota la cara segura y casi tranquila de saber a donde van y que harán allá.
-¿Hacia donde se dirige?- me pregunta una señora que se encuentra sentada al lado mío
Su cara cuenta unas cuantas experiencias a través de sus arrugas y su cabello canta el tiempo por las notas de su color grisáceo.
Agarro mi boleto y lo veo detalladamente, solo encuentro mi nombre, la hora y el lugar de partida, pero no el de llegada, empiezo a darme cuenta de que ya he estado varios días en este tren observando la vista que este ofrece pero no prestando atención hacia dónde se dirige.
A través de los días pude conocer a varias personas, muchos conocidos que iban paseando por varios vagones y se cruzaron conmigo, con muchas de ellas entable amistad y con otras sentía conexiones más allá, pero todas ellas se bajaron en su estación o simplemente siguieron cruzando por los vagones, algunos volvían y entablamos conversaciones espontáneas, pero los que se bajaron del tren, mas nunca los volví a ver.
Varias veces estuve al frente de la puerta viendo el paisaje que me deparaba afuera de este tren, pero muy dentro de mí sentía la corazonada de que no era mi bajada, de que en algún momento este maravilloso tren pararía en la estación correcta.
¿La estación correcta?
Muchas de las personas que me encontré sabían cual era su destino, se bajaron justo donde querían y cuando querían, otras me decían que la "estación perfecta" no existe que ellos se bajarían en la que les pareciera mas conveniente y de allí batallaban para hacerla perfecta, pero había gente que a mi me resultaba curiosa, gente que se quedaban a vivir en el tren y de allí conseguían la comodidad que ellos necesitaban.
Unos de esos días donde una persona que consideraba amigo se bajó en su parada, decidí buscar el propósito de este viaje, con euforia saqué papeles, lápices, mapas y demás, trazando todas las estaciones y recorridos que podía recorrer, que me interesaban o que, debido a la presión de que la mayoría de gente dentro del tren sabía a donde iba, me convencía que eran las rutas correctas para mi o que eran las que yo deseaba, sin embargo tuve de resultado un recorrido soso que me convenía y me interesaba a medias.
Pero con el tiempo empecé a disfrutar las vistas del tren y las parabas que hacía, me di cuenta que mis amigos y conocidos se bajaban cuando ellos se sentían listos u obligados, y yo no me siento ninguna de las dos, empecé a disfrutar el hecho de un viaje sin destino cierto, empecé a disfrutar el terror de que el tren se detenga en su última estación y mi tiempo de decidir se acabe, empecé a disfrutar de que tengo el poder de bajarme cuando me plazca.
Guardo el boleto en mi mochila llena de recuerdos, dirijo la mirada nuevamente a la señora y con una amplia sonrisa le respondo:
-No lo sé..Reto de: Micaela Aguirre.
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El cuaderno rojo
Non-FictionOpiniones, pensamientos y pequeñas historias que salen de mi cabeza plasmados en estas hojas digitales para el gusto de un público interesado :)