Mi sexy padrastro |𝐉𝐤 + [Completa]

28. Capítulo

Maratón
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Nara;

Una maldita semana en donde la pasaba realmente mal, mis días y noches no eran las mejores que digámos. Aveces debía ver como mi madre besaba al hombre que amo y dolía.

Estaba consciente de que Jeon no la besaba porque yo estaba presente y se que no lo hacia por mi, porque yo estaba allí. Odiaba rotundamente la situación. Lo mejor de todo era que aún no los he escuchado tener sexo, una noche escuche como mi madre se lo pedía a Jeon, pero al parecer el se las imgeniaba y siempre le ponía una excusa para no tener sexo con ella.

Por ese lado estoy tranquila.

La noche en que fue nuestra despedida, por asi decirlo. Ess noche me dolió en lo mas profundo, era como si mil dagas me hubieran apuñalado el corazón. Me había quedado sin articular palabra alguna cuando lo vi con sus mejillas empapadas en lágrimas y cuando me pidió una disculpa. No sabía exactamente porque se disculpaba pero digamos que me hago una idea.

¿También estás enamorado de mi Jeon? ¿Sientes lo mismo que yo siento por ti? ¿Me amas con la misma intensidad con la que yo lo hago?.

Tener a mamá en casa me daba igual desde hace años, ya me habia acostumbrado a no verla en casa, me acostumbré a siempre verla de viajes y con hombres. Cuándo regresaba solo preguntaba por la preparatoria y el cómo estaba, de resto no preguntaba mas, como tampoco se preocupaba por mis cosas y yo me acostumbre a eso. Ahora, no quería que estuviera aquí con nosotros, la verdad es que estábamos muy bien sin ella, talves suene como una maldita mala hija, pero es que eso eso era lo que yo pensaba.

Estábamos bien sin ella.

Ahora me encontraba en mi habitación escuchando música con mis audífonos ya que no tenía sueño. Eran alrededor de la una de la madrugada y yo aquí sin poder dormir, mi cabeza estaba llena de pensamientos y Jeon era uno de ellos. Suspiro sin ganas y me quité los audífonos.

Mala idea quitármelos.

Tragué con fuerza y sentí como mi corazón se rompía en miles de pedazos, mis lágrimas se agruparon en mis ojos y sentí un horrible nudo en la garganta que me era imposible tragar. Mis lágrimas no tardaron en bajar como cascadas, me llevé las manos a mis odios y me los tapé con fuerza.

Era obvio que esto pasaría, mamá es una mujer muy hermosa y Jeon no iba a poder resistirse mucho. Por mas de que el le inventará excusas... esas excusas no iban a funcionar por mucho tiempo. Me levanté de la cama y sentí un mareo al levantarme demasiado rápido, fui a mi clóset y me vesti rápidamente.

Cualquier lugar era mejor que quedarme a escuchar los gemidos de mamá.

Al terminar de vestirme salí de mi habitación cerrando la puerta y caminé por el pasillo. Tragué con dificultad cuando los gemidos de ella se escuchaban mas altos, era muy obvio que en estos momentos estén teniendo sexo.

Bajé corriendo las escaleras y abri la puerta principal para acto seguido cerrarla con demasiada fuerza para que el se enteré que yo los habia escuchado. Los portones se abrieron y luego yo sali de aquella casa, caminé por unas cuadras y luego agarré un taxi dándole la dirección del lugar donde queria ir. Minutos fueron los que pasaron cuando mi teléfono empezó a sonar, mire la pantalla y era Jeon, sin embargo, no le respondí y por lo visto el no iba a parar hasta que yo le respondiera. Algo que no iba a suceder y simplemente dejé que el teléfono sonará várias veces.

Minutos mas tarde pagué el táxi y luego me adentré al edificio donde el guardia me saludó amablemente ya que el me conocía. Me adentré al ascensor y luego presioné el número de su planta, llegué rápidamente a su apartamento y no dude en tocar el timbre varias veces. Aquel hombre varonil abrió la puerta adormilado, su cabello estaba alborotado y sus ojos algo hinchados por dormir.