Capítulo 5

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Kuroo Tetsuru

Vaya semana de mierda acaba de pasar. Solo ayer en la noche pude levantar y mejorar ese ánimo de perros que cargaba.

Primero el idiota de Chiba me inculpó diciendo que "mi lado alfa dominante" lo atacó sin sentido. Es un cobarde. Pero lo malo no es eso, es el hecho de que me quisieran dar una expulsión por "agresión y falta de respeto a un superior" también por el hecho de haber retado al subdirector. Mi madre casi explota y fue a reclamar al colegio, ya que ella es abogada y ahí fue donde le comentaron que un padre de familia se quejó de mi y pidió mi expulsión. Mi madre no es tonta, ella sabe que la escuela no haría eso a menos de que hubiera dinero de por medio, así que les amenazó que en donde me expulsaran por soborno de un padre de familia los iba a demandar de hasta por el hecho de haber nacido. Así que, como si estuvo mal de mi parte pelear (que no me arrepiento) me dieron esa semana de suspensión.

Por suerte, logré conversar con los chicos del equipo sobre la situación y le comentaron al entrenador, este me dijo que todo estaba bien y que una vez regrese compense el tiempo con una hora extra de entrenamiento por la semana, lo cual me encantó más de lo que quería porque así podré ver más tiempo a Kenma.

Oh, Kenma...

Si no fuera por los chicos que me escribieron cada día como veían al chico durante las prácticas, hace rato hubiera quedado calvo. Porque el rostro de terror total al momento de ser visto por lo que supongo es su padre, me pinchó el pecho con fuerza. Me hace pensar que Kenma no tiene una buena relación familiar y eso lo confirmé cuando me comentó en aquel cubículo en el baño del bar que sus padres fueron los que querían pagar para expulsarme. Por alguna razón no me quieren cerca de Kenma y eso me enoja mucho... Por su maldita culpa casi me arranco los cabellos esa semana y no me atrevía a tirarme a su casa porque no quería ver esa expresión de terror de nuevo o hacerlo pasar un mal rato.

Fue muy sorpresivo haberlo visto en el bar llegando con Bokuto, mi mejor amigo y que para colmo conociera a jugadores del Karasuno, este país es muy pequeño. Yo capté su presencia desde que llegó al bar, pero por su reacción y luego lo que me enteré me ha hecho entender que Kenma sufre mucho y su salud mental tiende de hilos finos en momentos críticos o de mucho estrés. También su ansiedad social es muy evidente, pero no conozco la causa. Sé que hay personas que son tímidas y es aceptable, pero Kenma no se pone tímido, le da pánico las situaciones. Tengo tantas ganas de saber que atemoriza su cabeza que me pone ansioso, pero debo tener calma para dejarlo hablar cuando esté listo.

Porque sé que estará listo en algún momento, me aseguraré de brindarle un lugar seguro donde sienta que pueda hacerlo.

La sorpresa de Bokuto al ver mi afecto con Kenma después del intento asqueroso de esa mesera, lo comprendo porque él sabe muy bien lo que he pasado, lo que pasó y mi opinión fuerte con los omegas y el amor en sí, pero mierda el entrenador Nekomata tiene razón.

Me he sentido incompleto desde que lo vi entrar en su casa de esa manera aquel jueves.

Su aroma no es provocativo, ni seductor. Es suave, muy delicioso y me hace sentir en una paz muy acogedora, jamás sentí unas feromonas así en un omega. Me siento muy completo cuando está cerca, y el ver esas mejillas sonrojadas, ese cabello largo y sus hermosos ojos miel, yo no puedo dejar que mi miedo me prohíba estar con ese ángel. Quiero conocerlo, quiero saber más de él y quiero tenerlo cerca lo más que pueda. El hecho de que seamos capaces de darle nombre a nuestros aromas, solo aumentan las ganas.

Ni sus padres, ni el subdirector, ni Chiba, ni nada me van a impedir que yo esté cerca de Kenma. Porque es muy cierto que una vez empiezo algo lo finalizo, y con Kenma quiero iniciar algo que no finalice nunca.

Entre Canela y PinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora