ODDINARY HEROES | HyunLix.

20

Felix se encontraba haciendo sus deberes, no iba a salir, ya hacía un mes que sus amigos no habían dado señales de vida y solamente salía con Minho y Jisung, estaba cansado de todo esto, presentía que lo que le pasó a HyunJin fue todo su culpa, de repente, una lágrima cayó sobre aquél papel llena de ecuaciones. Felix empezó a llorar, la culpa lo calcomía por dentro, aún sentado en su silla abrazó sus rodillas y escondió su cabeza entre estas, de repente, su teléfono empezó a sonar.

—¡Lixie!

—Jisung, hola. —contestó un Felix con ojeras y lleno de lágrimas sin ganas de responder.

—Oh... ¿Llamé en mal momento? —La verdad, Jisung sí sonaba algo preocupado, pero aún así usó su tono sarcástico haciendo reír un poco a Felix.

—Pues sí...

—Lo lamento, si quieres puedo llamar en otro momento.

—¡No! Digo... No... Porfavor... —más lágrimas caían de su rostro.

—Lixie... ¿Estás bien? ¿Quieres que vaya a tu casa? —Felix negó con su cabecita, suspirando.

—No... Pero tranquilo, no es necesario que vengas... ¿por qué llamaste?

—¿Seguro que no necesitas ayuda, Lix?

—Estoy bien. ¿Para qué llamaste?

—Mañana es tu cumpleaños. —Jisung sonaba emocionado pero eso solamente hizo llorar más a Felix.

—Lo sé.

—¿No estás emocionado? Harás 20 años, te me haces viejo. —Jisung intentó usar un tono nostálgico y sarcástico, pero esta vez sólo obtuvo a un Felix más serio.

—No me alegra saber que estoy más cerca de la muerte y no me emociona pasar mi cumpleaños sabiendo que tres de mis mejores amigos están muertos.

—Oh... ¡Vámos Lixie, anímate! ¡Lino y yo te vamos a hacer una fiesta!

—No es necesario...

—¡Claro que lo es! Por ahora somos tus únicos amigos... Te pasaré la ubicación, es en un bosque, ¡pero tranquilo! Lo tengo todo planeado... Te prometo que te olvidarás tus problemas.

—Está bien. —Felix colgó, suspirando de nuevo, viendo como Jisung le envió la ubicación del lugar. Se rió para él mismo. —En este lugar parece que me secuestrarán. —Susurró con una mini sonrisa, recordando como Felix y Jisung de pequeños siempre que intentaban ir a aquél bosque, sus madres los regañaban. Solamente que no recordaba el rostro de su madre, qué extraño, Felix tiene una madre, pero en ese recuerdo no parece ser ella...

De repente, golpes en la ventana sacaron a Felix de sus pensamientos.

—¿Un pájaro se la volvió a ostiar contra la ventana? —Preguntó Felix, abriendo la ventana y la persiana a la misma vez. Felix observó que afuera no había nada, entrecerró sus ojos. —Pues sí habrá sido un pájaro. —Felix iba a regresar a su asiento hasta q unos ruidos en la pared hicieron que se diera la vuelta, revisando la ventana de nuevo con brusquedad. —Puto pájaro. —Susurró, al ver con más detalle la ventana, no encontró nada, suspiró, pero su instinto le dijo de observar a arriba, y así hizo. Su respiración se entrecortó, haciendo que su cuerpo se sobresalte y abriera mucho los ojos, se quedó sin aliento. ¿De verdad era él?

—Hola, bebé. ¿Me hechaste de menos?

—¿J-Jinnie?