Beautiful (Minsung)

Capítulo 10 La pulsera

-Hola Ji, disculpa la demora, me entretuve copiando los datos del proyecto final, pero ya estoy aquí, ¿qué era lo que querías comentarme?-

Me decía un Jeongin presuroso, sentándose a mi lado con la respiración agitada.

Lo dejé que tomara aire y se acomodara en el asiento que se encontraba enfrente de mi en la mesa que siempre elegía en la cafetería. Era mi favorita, junto al enorme ventanal que daba al campo de juegos.

-No es nada urgente.- 

Le contesté mientras le acercaba las servilletas para que pudiera secarse el sudor de la frente.

-¿Acaso veniste corriendo desde tu salón?- 

Le pregunté con preocupación.

-Pues si, un poquito, no quería dejarte esperando mucho tiempo.- 

Me contestó mientras se limpiaba la frente con las servilletas que le había acercado.

-Bueno, entonces ¿no quieres tomar algo antes de que te cuente para qué te quería ver?- le decía mientras levantaba la mano para que la auxiliar de la cafetería se acercara a nosotros.

Jeongin me miró con agradecimiento y le dijo a la señorita que se acercaba con libreta en mano: -una naranjada mineral con poco hielo, por favor, ah y un sándwich de pavo, es que aún no he comido nada.-

Esto último lo dijo dirigiéndose hacia mí.

Volteé a ver a la señorita y le pedí un café americano con hielo. Cuando ella se alejó para ir a entregar la comanda, le dije a Jeongin con voz tranquila, mientras sacaba la pulsera de la bolsa de mi mochila.

-Innie, quiero pedirte un favor y si no puedes, lo voy a entender. Mira, esta pulsera fue un regalo que me hicieron cuando era niño y significa mucho para mí. Quisiera utilizarla ahora pero no me queda y me gustaría saber si puedes arreglarla, con eso de que eres un experto en joyería, sería increíble que le dieras una nueva vida.-

Dije esto último colocando la pulsera en la mano de Jeongin, quien la miraba cuidadosamente girándola para verla detenidamente. 

Acto seguido, tomo mi muñeca y la comenzó a medir, sacó un cuaderno de su mochila e hizo algunas anotaciones, para después guardar en la bolsa de su camisa, mi apreciada pulsera.

-Con mucho gusto Ji, yo la arreglo y verás que quedará como nueva, sólo tengo una pregunta, ¿quién te la regaló y por qué es tan especial para ti?- 

Me miraba con curiosidad y en ese momento no sé qué me pasó por la cabeza pero comencé a contarle todo, absolutamente todo sin omitir un solo detalle. Innie me miraba con mucho interés, escuchando atentamente mi historia y emocionándose cuando le dije que ese chiquillo había sido mi primer amor.

-Te la tendré lista para la próxima semana ya que estoy terminando con mis exámenes y quiero hacerlo perfecto.- Me contestó Jeongin.

-No te preocupes Innie, no me urge, sólo quería poder usarla ya que me hace sentir más tranquilo, esa pulsera tiene un súper poder, ayuda a que las cosas se solucionen, por eso es tan importante para mi en estos momentos.-

No quise entrar en más detalles con mi amigo, ya que el objeto de mi estrés era precisamente su hermano, por lo que decidí dejarlo así.

En ese momento llegó lo que habíamos pedido y nos dispusimos a comer cambiando la conversación a temas escolares. 

Estábamos a punto de terminar cuando Félix y Seungmin se unieron a nosotros y en medio de risas continuamos haciendo planes para el fin de semana, el cual pasaríamos en la casa de campo de Félix.

Iríamos los 4 en mi auto y compraríamos algunos víveres para pasar el sábado y el domingo descansando, jugando y platicando, nada complicado, sólo queríamos un respiro después de tantas tareas y exámenes. 

Apenas era lunes, pero ya nos estábamos saboreando ese viaje y hoy se lo comentaría a Hyunjin, estaba seguro de que comprendería perfectamente que necesitaba pasar esos dos días con mis amigos. 

El resto de la semana pasó sin contratiempos, mi novio aceptó gustoso que me tomara unos días y decidí no pensar más en Minho, total, no había necesidad de volver a encontrarme con él, sobre todo ahora que se encontraba trabajando en la empresa de su familia.