Beautiful (Minsung)

Capítulo Final Nuestro hogar

Jisung

Las semanas habían pasado y por fin era el día de mi ceremonia de graduación. Sunwoo estaba en la cárcel y ya no formaba parte de mis pesadillas. Minho se había encargado de demostrarme que el único en su mente y en su corazón era yo. La terapia también estaba ayudándome demasiado, me sentía mucho más en control de mis pensamientos gracias a la ayuda del doctor Choi Minho.

A la ceremonia asistieron todos ya que también se estaban graduando mi primo Seungmin, Félix e Innie. Por lo que nuestros novios y nuestros padres estaban presentes.

Al terminar la ceremonia hubo una fiesta en el salón del hotel de los padres de Minho. Todo era de ensueño y yo entre sus brazos me sentía realizado.

-Te ves hermoso esta noche cariño, no puedo dejar de mirarte, este traje que elegiste resalta tu hermoso cuerpo.- Me sonrojé ante las palabras de Minho, quien me sostenía por la cintura, deslizando una de sus manos a mi trasero.

-Aquí no Min, espera a que lleguemos a casa.- Me había comenzado a excitar y no era ni el momento ni el lugar.

-¿Por qué esperar si estamos en el hotel de mi familia?, yo digo que subamos a la suite y hagamos lo que estamos deseando hacer.-

Me dijo Minho apretando mi trasero y acercándome aún mas a su cuerpo, pudiendo sentir lo necesitado que estaba. Por lo que tomé la decisión.

-Vamos Minmin, no creo poder soportar más esta tortura, yo también te deseo demasiado.-

Discretamente salimos del salón y nos dirigimos hacia el ascensor, Minho tenía la tarjeta de la suite ya que se la había pedido al personal de recepción, quienes sonrieron imaginando para qué la quería cuando me vieron esperándolo a unos cuantos pasos.

En el elevador volvimos a besarnos con intensidad.

Yo ya había perdido la cordura completamente y había comenzando a desabotonar mi ropa, pero Minho me detuvo.

-Sungie, bebé, espera, nos pueden ver por las cámaras de seguridad. Ya casi llegamos. –

En ese momento se abrió el elevador e ingresamos directamente a la suite de lujo del hotel. Minho me cargó y me llevó directamente a la habitación.

Comenzó a desvestirme con mucho cuidado pero también con hambre en su mirada.

Yo torpemente traté de quitarle la ropa pero mis dedos no cooperaban, me sentía demasiado encendido.

-Espera bebé, te ayudo, ¿por qué estás tan desesperado amor?, tenemos toda la vida para amarnos.- Me besó mientras me decía esto. Yo lo miré y le dije.

-Porque tengo miedo de que esto se termine o de que alguien llegue y rompa mi felicidad, o de que te enamores de alguien más.-

Su respuesta fue arrancarme la ropa y quitarse la suya rápidamente.

Me abrazó fuertemente y mientras su lengua tomaba la mía e intensificaba la pasión en sus besos, yo gemía como desesperado.

De pronto se detuvo y me miró con tanta pasión y amor que comencé a temblar.

-Sungie, ¿acaso tengo que tatuarte en la piel que soy tuyo?, ¿de qué forma te puedo quitar todos esos miedos amor?.-

-Sólo ámame Minho, hoy, mañana y siempre, por favor.-

Nos tiramos en la cama y dimos paso a todas esas emociones que existían entre nosotros, lo besé de pies a cabeza y de igual forma fui besado, me entregué a Minho como si fuera mi primera vez, por que con él siempre era así.

Estuvimos sintiéndonos y amándonos toda la noche, hasta que no pudimos más y abrazados nos quedamos dormidos.

A la mañana siguiente nos despertó el ruido del celular de Minho.